Los últimos compases de ‘La Favorita 1922’ resonaron en los salones de los espectadores como un eco lejano, dejando tras de sí un rastro de intrigas sin resolver. La alianza entre Mediaset y Bambú Producciones sorprendió con una apuesta de época que, al menos por el momento, no tendrá continuación.
Sin embargo, la pregunta persiste: ¿cerró definitivamente sus páginas esta historia ambientada en la España de los años veinte, o existe alguna puerta abierta a una tercera entrega? El desenlace, con audiencias a la baja, parecía sellar su destino… pero las pasiones no siempre se ajustan a las cifras.
2El descenso que nadie esperaba

La trayectoria de la serie siguió una curva que comenzó en lo alto y terminó deslizándose sin freno: del 17,1 % de cuota inicial se pasó a un 6,6 % en el último episodio. Ese descenso certificó el desgaste de la trama a ojos del telespectador medio, que comenzó a buscar otras distracciones.
Los hilos narrativos, superficiales al principio, parecían perderse entre subtramas menores y giros forzados. El tirón inicial de la productora y la plataforma Netflix no bastó para sostener la llama de un melodrama que pedía a gritos un ritmo más consistente.