¿Sabías que solo unos pocos vehículos pueden circular a 150 km/h sin temor a multa? Para ello, la DGT concede la señal V-12 a aquellos coches que realizan ensayos controlados de velocidad en tramos predeterminados y debidamente señalizados. Este permiso no equivale a carta blanca si no a una autorización estricta que implica itinerarios delimitados y condiciones muy concretas.
Cada fabricante interesado debe solicitar la autorización a la DGT al menos tres días antes del inicio de las pruebas, presentando un expediente exhaustivo con datos técnicos y el itinerario previsto. Una vez aprobado, el vehículo recibe la placa V-12 —con las siglas F.V. en blanco sobre fondo rojo— junto a la matrícula delantera y trasera, lo cual le permite superar en 30 km/h el límite general de la vía, alcanzando hasta 150 km/h. La señalización especial y el comunicado previo a las autoridades garantizan que todo se realice bajo un control absoluto.
4El respaldo legal: Artículo 47 del Reglamento

El Artículo 47 del Reglamento General de Circulación otorga a los titulares de la vía la facultad de establecer limitaciones específicas mediante señalización. En defecto de estas, se aplican los límites genéricos para cada tipo de carretera. Gracias a esta disposición, la DGT puede autorizar ensayos excepcionales que permitan sobrepasar en 30 km/h el tope habitual de 120, llegando así hasta 150 km/h de forma totalmente legal.
Este pilar legal es esencial para sostener la señal V-12 sin que se choque con otras normas de tráfico. La DGT utiliza este artículo: base para diseñar un protocolo riguroso, que combina flexibilidad para la innovación con la seguridad de todos los usuarios.