Las grandes gasísticas europeas harán bien en ponerse en guardia: según una información filtrada por Reuters, Aramco, la petrolera estatal de Arabia Saudí, está considerando la venta de hasta cinco plantas de energía alimentadas por gas como parte de un esfuerzo más amplio para captar miles de millones de dólares en liquidez.
La agencia, que cita «fuentes con conocimiento del asunto», especifica que la posible venta de cuatro o cinco plantas de energía a gas que abastecen a refinerías podría recaudar por sí sola alrededor de 4.000 millones de dólares (casi 3.400 millones de euros al cambio actual), mientras el gobierno saudí presiona a Aramco para aumentar las ganancias y los pagos al Estado.
Aramco, la empresa más rentable del mundo y la principal fuente de ingresos del Estado saudí, ha estado buscando vender algunos activos, mejorar la eficiencia y reducir costos, informó Reuters.
La empresa también reducirá sus pagos de dividendos en casi un tercio este año, ya que los menores precios del petróleo afectan sus ingresos. Riad, que posee directamente el 81,5% de Aramco, depende en gran medida de esos pagos, que incluyen regalías e impuestos.
ARABIA SAUDÍ SE ADELANTA A LA DECADENCIA DEL PETRÓLEO
Además de la venta de las plantas de energía a gas, la compañía podría desprenderse de activos como complejos habitacionales y oleoductos, dijeron dos de las fuentes. También podrían estar en venta activos de infraestructura portuaria, según una de ellas y una tercera persona.
Aramco declinó hacer comentarios sobre las posibles ventas de activos y no respondió de inmediato sobre la cantidad de dinero que podría obtenerse con esta recaudación de fondos.
La oficina de comunicaciones del gobierno saudí no respondió a las solicitudes de comentarios por parte de Reuters, que no pudo determinar un cronograma para la venta. Las tres fuentes hablaron bajo condición de anonimato, debido a que el proceso es privado.
Según su informe financiero de 2024, Aramco posee total o parcialmente 18 plantas de energía e infraestructura relacionada en el país, que suministran energía a sus plantas de gas y refinerías. Se espera que otras plantas de energía entren en operación pronto. El proyecto de la planta de gas de Tanajib, en la costa del Golfo Pérsico, está previsto que comience a operar este año.
LOS PLANES DE VENTAS SON COHERENTES CON los ambiciosos proyectos domésticos del príncipe heredero de Arabia SaudÍ, Mohammed bin Salman, para diversificar la economía más allá del petróleo
Las posibles ventas de activos por parte de Aramco coinciden con los ambiciosos proyectos domésticos del príncipe heredero de Arabia Saudita, Mohammed bin Salman, para diversificar la economía más allá del petróleo, ante la presión fuerte presión que ejerce la caída de los precios del crudo.
Los ingresos petroleros representaron el 62% de los ingresos del Estado el año pasado, y el presupuesto saudí muestra un déficit de más de 30.000 millones de dólares en 2024, a pesar de un ingreso extraordinario de 199.000 millones de dólares provenientes de Aramco.
Aramco vendió 5.000 millones de dólares en bonos en mayo y dio señales de que podría endeudarse aún más. El país está invirtiendo cientos de miles de millones de dólares en proyectos, incluidos eventos emblemáticos como la Exposición Universal 2030 y la Copa Mundial de la FIFA 2034.
La petrolera nacional saudí también busca recaudar fondos para infraestructura atrayendo inversionistas, según se supo en en mayo.
LOS POSIBLES COMPRADORES DEL GAS SAUDÍ
Las fuentes consultadas por Reuters adelantaron que, en principio, las interesadas en la compra de los activos de Aramco serían empresas locales, como compañías de servicios públicos del país. Nada impide, sin embargo, que firmas occidentales del ramo, como Naturgy, puedan lanzarse a la piscina de gas saudí.
Naturgy -que últimamente vuelve a ser objeto de rumores sobre su posible compra por parte de otra ‘petromonarquía’ árabe, Emiratos Árabes Unidos- anunció a finales de mayo que se gastará 500 ‘kilos’ en la puesta a punto de toda una nueva gama de activos de gases renovables recientemente adquiridos.
La compañía presidida por Francisco Reynés hizo este movimiento apenas un par de semanas después de captar 1.000 millones de euros en sendas emisiones de bonos senior.
Por otro lado, el pasado 13 de junio concluyó el plazo de aceptación de la oferta pública voluntaria parcial de adquisición de acciones presentada por Naturgy sobre sus propios títulos (la conocida como ‘auto-Opa’) para hacerse con hasta un 9,08% de su propio capital, con el objetivo de mejorar su free-float.