La OCU ha puesto fin a las especulaciones: Madrid es la ciudad con el agua de grifo mejor valorada de España. Después de analizar la dureza del agua en más de un centenar de municipios, la organización concluye que la capital ofrece un agua blanda, con mineralización débil y un sabor suave. Esto no solo convence a quienes creen en las bondades del grifo, sino que además ahorra tiempo y dinero a miles de hogares.
Consumir agua del grifo cuesta apenas 5,25 € al año por hogar, frente a los casi 500 € de la opción embotellada. La OCU recuerda también el impacto climático del transporte y el plástico: cada botella genera residuos y emisiones que, multiplicadas por millones de envases, resultan muchísimo más dañinas que la sencilla acción de abrir el grifo.
6La clave del filtro en zonas duras

En localidades con agua muy dura, la OCU recomienda instalar un filtro de carbón activo con un coste aproximado de 30 €. Este sistema elimina el exceso de cal y mejora notablemente el sabor sin encarecer la factura de la luz o el agua.
El filtro dura unos seis meses y es muy sencillo de reemplazar. Además, evita que la cal obstruya grifos y electrodomésticos, prolongando su vida útil. Para muchos usuarios en ciudades costeras, esta inversión mínima resulta fundamental para disfrutar del agua del grifo sin renuncias.