La OCU ha puesto fin a las especulaciones: Madrid es la ciudad con el agua de grifo mejor valorada de España. Después de analizar la dureza del agua en más de un centenar de municipios, la organización concluye que la capital ofrece un agua blanda, con mineralización débil y un sabor suave. Esto no solo convence a quienes creen en las bondades del grifo, sino que además ahorra tiempo y dinero a miles de hogares.
Consumir agua del grifo cuesta apenas 5,25 € al año por hogar, frente a los casi 500 € de la opción embotellada. La OCU recuerda también el impacto climático del transporte y el plástico: cada botella genera residuos y emisiones que, multiplicadas por millones de envases, resultan muchísimo más dañinas que la sencilla acción de abrir el grifo.
4Frescura y comodidad diaria

Nada como una jarra de vidrio llena de agua fresca de la nevera para sistemas de autocuidado en casa. El frío atenúa el olor y sabor a cloro, un truco que respalda la OCU. Dejar correr el grifo unos segundos elimina sedimentos estancados y garantiza un trago más limpio desde el primer vaso.
Este sencillo gesto se traduce en bienestar y evita depender de pesadas garrafas. Además, con una jarra siempre lista, la familia bebe sin pensarlo dos veces, mejorando la hidratación diaria: reduciendo el riesgo de consumir menos agua por pereza o inercia.