Hace casi dos meses, Alphavalue manifestaba su preocupación por los efectos que la guerra arancelaria declarada por EEUU pudiera tener en la impecable trayectoria de Elecnor durante este ejercicio. La energética ha evaporado de un plumazo los temores con la renovación de su financiación sindicada, lo que allana el camino hacia el cumplimiento de sus objetivos estratégicos.
ELECNOR FIRMA UN NUEVO CONTRATO DE FINANCIACIÓN SINDICADA
La financiación sindicada es un tipo de contratación financiera suscrita por un conjunto de entidades, bajo unas mismas condiciones financieras, con el objeto de compartir el riesgo asociado a la inversión, materializada en un único contrato que regula tanto las obligaciones de la entidad destinataria de la financiación como las de las entidades prestamistas.
En 2014, Elecnor firmó un contrato de este tipo, que había sido sometido a sucesivas novaciones, la más reciente en 2021. Ahora ha sido sustituido por un nuevo acuerdo que amplía el financiamiento.
La cuantía de la nueva financiación sindicada asciende a un máximo de 350 millones de euros, con un vencimiento de cinco años. Este plazo, que expira en 2030, «es el habitual en este tipo de financiaciones bancarias y permite alargar la vida media de las fuentes de financiación, mejorando así la fortaleza financiera frente a los desafíos del Plan Estratégico del Grupo», ha manifestado Elecnor en un comunicado.
El contrato ha sido suscrito por Santander (agente, coordinador y bookrunner), Caixabank (bookrunner), Abanca, BBVA, Kutxabank, Banco Sabadell, Barclays y Unicaja como entidades directoras principales (Mandated Lead Arrangers, MLAs); y por Bankinter, Société Générale, Banco Cooperativo, Crédit Agricole y Banca March como entidades directoras (Lead Arrangers, LAs).
LA FINANCIACIÓN HA SIDO SUSCRITA POR SANTANDER, CAIXABANK, ABANCA, BBVA, KUTXABANK, SABADELL, BARCLAYS Y UNICAJA, ENTRE OTRAS ENTIDADES
Para esta financiación, Elecnor ha contado con Kenta Capital como asesor financiero. Cuatrecasas ha sido responsable del asesoramiento legal y G-Advisory es la consultora encargada de emitir los informes de sostenibilidad.
El comunicado de la energética resalta que la financiación reseñada cumple con los requisitos establecidos por los Sustainability Linked Loan Principles, por lo que ha sido calificada como sostenible.
«La sostenibilidad en el Grupo Elecnor se articula en torno a su propósito: llevar infraestructuras, energía y servicios, impulsando el desarrollo y creando oportunidades en todo el mundo» -agrega la nota emitida por el grupo- «Este compromiso con la sostenibilidad es inherente a todo el desarrollo de sus actividades y su estrategia empresarial, así como en las relaciones con sus grupos de interés».
SALVAGUARDA FRENTE A LA INESTABILIDAD ARANCELARIA
Con este nuevo préstamo, Elecnor apuntala sus cimientos ante la inestabilidad del escenario comercial internacional, trastocado por la guerra de aranceles declarada por el presidente estadounidense, Donald Trump.
Los sucesivos aumentos tarifarios impuestos por Washington habían despertado la preocupación de entidades como Alphavalue, que a principios de mayo expresó sus dudas sobre la capacidad del grupo energético para hacer frente a la coyuntura. El informe de la financiera manifestaba incertidumbre sobre el futuro recorrido bursátil de la energética, a pesar del buen recorrido de ésta en la primera fase del presente ejercicio.
Los resultados del primer trimestre de 2025 de Elecnor muestran un incremento de las ventas del 12%, alcanzando los 897 millones de euros, con un crecimiento significativo tanto en el mercado nacional como en el internacional. La buena marcha del negocio también alcanzó a la cartera de pedidos, que aumentó hasta los 3.000 millones de euros. Ambas métricas impulsaron el resultado bruto de explotación (Ebitda), que creció un 26,4%, mientras que el beneficio neto aumentó un 54,7%, alcanzando los 25 ‘kilos’.
Alphavalue advertía que las medidas proteccionistas -especialmente el endurecimiento de los aranceles sobre la importación de tecnología ‘verde’ en EEUU- «podrían generar obstáculos que afecten a las cadenas de suministro y a los costes de los proyectos».