Con la llegada del calor veraniego, dominar el arte de elegir la mejor sandía es esencial para disfrutar de un bocado fresco y jugoso que hidrate y sacie. La OCU ha recopilado seis claves fiables: color, pedúnculo, peso relativo, sonido, forma y tacto, para que cada compra sea un acierto y tu sandía nunca resulte seca ni sin sabor.
Aplicando estos consejos sencillos, convertirás cada merienda en un momento refrescante y saludable. Con la OCU como guía, aprenderás a descartar piezas inmaduras o pasadas de punto y a identificar el grado ideal de madurez. Olvida los disgustos y saborea siempre una fruta llena de jugo y dulzura.
4Golpeo con nudillos y eco hueco

Golpea suavemente la sandía con los nudillos: un sonido hueco y claro es señal de madurez óptima, afirma la OCU. Si el eco suena sordo, la pieza aún no alcanzó su punto de azúcar y fibra adecuados, resultando en una experiencia menos satisfactoria.
Este truco casero te permite evaluar la estructra interna sin abrir la fruta. Practica con varias sandías para afinar tu oído y reconocer al instante las piezas que prometen una pulpa rica en jugo y aroma auténtico.