martes, 24 junio 2025

Nude Project cimenta su red empresarial más allá de la ropa

Largas colas a las puertas de sus tiendas, especialmente en su nueva flagship de Madrid, situada en la calle Fuencarral. Han conseguido vestir a Madonna, atraer a Ronaldinho o reunir en un mismo encuadre a Belén Esteban y Victoria Federica. También han logrado asaltar las portadas de las principales revistas de moda y tendencias a nivel mundial. Las ventas del grupo se triplican cada poco tiempo, manteniendo márgenes similares a los de gigantes como H&M, y acercándose incluso a las cifras del imbatible Inditex. Pero lo más interesante de todo es que Nude Project es mucho más que una exitosa firma de ropa.

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Lo que Bruno Casanovas y Álex Benlloch imaginaron cuando apenas tenían 19 años ha superado cualquier molde tradicional. Nude Project se está consolidando como un movimiento 360, una red empresarial que tiene como punto de partida y llegada la venta de ropa, pero que en su recorrido ofrece una historia, una comunidad y una manera única de formar parte del proyecto. Para ello, los dos emprendedores no se limitan a su negocio de moda —presente tanto online como en tiendas físicas dentro y fuera de España—, sino que alimentan un auténtico «ecosistema juvenil» a través de las redes sociales, canales de YouTube y Spotify, además de diversificarse hacia sectores como la restauración o los festivales.

EL ECOSISTEMA EMPRESARIAL DE NUDE PROJECT

Todo comenzó en las redes sociales. De hecho, el propio Benlloch suele recordar que, antes siquiera de que el proyecto existiera, él ya se dedicaba «a hacer vídeos». Años después, la comunicación se ha convertido en una de las armas más poderosas de la marca. En 2023 —último ejercicio con datos disponibles—, el gasto en comunicación superó los 400.000 euros, duplicando la inversión del año anterior. Esta apuesta ha convertido sus canales de YouTube (con casi un millón de suscriptores) y Spotify en herramientas clave para difundir la cultura Nude Project: un espacio para reflexionar junto a celebrities y, al mismo tiempo, un altavoz propio.

Sin embargo, el ‘ecosistema Nude’ no se limita al entorno digital. También cobra vida en los encuentros físicos. Ejemplos como la expectación por acudir a conciertos o eventos creados por influencers y streamers —como La Velada del Año, de Ibai Llanos, o el impactante Dogfight Wild Tournament de Jordi Wild— muestran la fuerza de este nuevo modelo de comunidad. Nude Project, consciente de este fenómeno, decidió dar un paso más y lanzó su propia firma de eventos Nude Festival, una compañía destinada a replicar ese formato de experiencias en vivo. Además, incursionaron en el sector de la restauración con Desnude Beer, una firma que refuerza y extiende su identidad de marca más allá de la moda.

Nude Prpject.

El entramado empresarial de Benlloch y Casanovas también está diseñado para expandirse internacionalmente. Las últimas cuentas depositadas en el Registro Mercantil reflejan movimientos claros en ese sentido, con proyectos en marcha en Portugal e Italia, bajo las firmas Nude Portugal y Nude Milano. A esto se suman nuevas aperturas en ciudades clave como Ámsterdam y Berlín. A nivel online, la marca ha comenzado a consolidarse en Estados Unidos, donde ya ha registrado ventas por cerca de un millón de euros.

Nude Project: del éxito de las tiendas al exigente mundo online

En el corazón del entramado empresarial destacan dos compañías clave: Nude Project y Nude Project Worldwide. Paradójicamente, la primera es la encargada del negocio online, mientras que la segunda gestiona el desarrollo retail, especialmente en España. La comparación entre ambas refleja tanto los aciertos iniciales del proyecto como las dificultades inherentes al comercio electrónico. Aunque el margen bruto ronda un cómodo 50% en ambos casos —similar al de H&M, aunque por debajo del 60% de Inditex y Mango—, el margen neto del negocio físico duplica al del online.

También se observan diferencias notables en el ritmo de crecimiento. En 2023, el canal online duplicó sus ventas, pasando de 8,4 a 17,1 millones de euros, pero su beneficio solo creció un 16%. En cambio, el negocio físico multiplicó por seis su facturación y por siete sus beneficios. ¿La razón? La estructura de costes. Las tiendas físicas, con sus elevados costes fijos, permiten una mayor rentabilidad cuando la actividad es alta, ya que esos costes quedan cubiertos. Por el contrario, el modelo online, basado principalmente en costes variables, ofrece menor escalabilidad de beneficios.

Este es uno de los secretos mejor guardados de la firma: Nude Project está apostando por una expansión física, lo que le está permitiendo escalar márgenes y beneficios con rapidez. Un ejemplo claro es la reciente apertura de su macrotienda en Madrid, que a pesar de duplicar su superficie, sigue registrando largas colas para entrar. El éxito es innegable, aunque también puede ser frugal en los negocios. Pero no la de las ideas. Por ello, Benlloch y Casanovas buscan desarrollar la idea de Nude Project más que simplemente vender ropa.


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