El mito del corte de digestión al bañarte después de comer persiste como una realidad absoluta o una tradición exagerada en cierto folclore gastronómico. Todos lo hemos escuchado alguna vez: supuestamente no te metas en el agua hasta dos horas después de comer.
Repetido por mamás, papás y abuelos, este consejo se ha arraigado profundamente en la cultura, convirtiéndose en una regla de verano no escrita prácticamente de la noche a la mañana. ¿Qué hay de cierto en esta advertencia? Pero, ¿qué hay de cierto detrás de esta ominosa advertencia?
2Lo del corte de digestión al bañarse después de comer y lo que dicen los entendidos

Bañarse después de ingerir alimentos aparentemente no presenta contraindicación alguna según un informe emitido por el Comité Asesor Científico de Cruz Roja Americana. ¿De dónde viene miedo entonces? La confusión surge porque existe un fenómeno físico real relacionado con el baño en agua fría: el síndrome de hidrocución o shock de agua fría.
¿Qué es el síndrome de hidrocución? La inmersión repentina en agua fría precipita un cambio drástico en la temperatura corporal que no tiene ninguna relación con los procesos digestivos o la función intestinal de alguna manera. El síndrome de hidrocución aparece repentinamente ante fluctuaciones drásticas de temperatura cuando el cuerpo humano entra en contacto con agua helada con bastante rapidez y extremadamente fría.