WhatsApp se mantenía libre de anuncios durante años siendo una de pocas aplicaciones con tal característica curiosa evidentemente. Sus fundadores dejaron claro desde el principio que querían forjar una herramienta enfocada en comunicación privada rápida sin interrupciones publicitarias molestas.
Muchos temían que la filosofía cambiara drásticamente en 2014, cuando Facebook pasó a llamarse Meta y la adquirió con bastante rapidez en el extranjero. Mark Zuckerberg prometió no publicar ningún tipo de publicidad, pero la realidad se impuso brutalmente y WhatsApp ahora está inyectando publicidad sigilosamente en su plataforma.
2Meta ya ha dado su consentimiento a ciertos canales

Meta ha comenzado a permitir a ciertos administradores de canales suscripciones mensuales para contenido exclusivo al que apenas se podría acceder de otra manera a través de diversos medios. En el futuro, la empresa cobrará una comisión del 10% sobre dichos ingresos, lo que demuestra un modelo de monetización mucho más claro.
¿Por qué empezar con Estados y Canales en lugar de examinar el valor de la pestaña «Novedades» de Meta desde el principio? Más de 1.500 millones de personas acceden diariamente a esa sección de la aplicación de manera sorprendentemente sencilla. Pese a carecer de tanta prominencia como los chats este apartado ha cobrado mucha importancia en la experiencia del usuario sobre todo con surgimiento de canales de noticias.