A punto de cumplirse tres años desde que abandonó la prisión de Brieva, Iñaki Urdangarin ha decidido romper su silencio de la manera más contundente posible: con un libro de memorias que promete sacudir los cimientos de la familia real. Pilar Eyre, una de las periodistas más veteranas y respetadas en la cobertura de la monarquía española, ha sido la encargada de lanzar la bomba informativa a través de la revista Lecturas. Según ha explicado, el exduque de Palma ya tiene prácticamente finalizado el manuscrito y su publicación está prevista para enero de 2026. No se tratará de una simple autobiografía, sino de una obra sin filtros, escrita de su puño y letra, sin ningún tipo de supervisión ni censura por parte de Zarzuela. «Explotará una bomba de largo alcance», ha adelantado Eyre, resumiendo el potencial impacto de un testimonio que, según sus fuentes, será directo, honesto y cargado de reproches.
2Un libro que destapará todos los secretos

No se tratará únicamente de una narración centrada en el dolor y la decepción. El libro también pretende ofrecer un lado más introspectivo y constructivo. Eyre ha adelantado que será una obra con un tono en parte reflexivo, incluso con tintes de autoayuda. Urdangarin ha querido compartir las lecciones que ha aprendido, los momentos de transformación personal, y algunos principios que considera valiosos tras su paso por la cárcel. Así, el lector no solo se encontrará con confesiones dolorosas y críticas directas, sino también con pensamientos más íntimos y propuestas de superación personal. Aunque no se ha confirmado si usará seudónimos o si mantendrá nombres reales, lo que sí parece garantizado es que no se ha suavizado ningún episodio para proteger sensibilidades institucionales. La editorial, tal como remarca Eyre, “no tiene ningún tipo de ligazón ni servidumbres con la Casa Real”.
Aunque la infanta Cristina no ha intervenido en la redacción del libro, sí es conocedora de su existencia. Según explica Pilar Eyre, Cristina ha mostrado una actitud comprensiva y no se ha opuesto a la publicación. Su distanciamiento sentimental no ha impedido que mantenga un vínculo cordial con el padre de sus hijos, y, pese al daño que podría causar el libro en la imagen pública de la institución a la que pertenece, ella parece haber respetado la decisión de Urdangarin de contar su versión. A lo largo de las páginas, él repasa también los momentos más felices junto a ella, la vida que compartieron antes del escándalo, y cómo la presión mediática e institucional acabó quebrando aquella familia.