Impactante investigación de la OCU demuestra que la fecha de caducidad de los yogures no es un límite inflexible, sino una referencia orientativa ajustable según condiciones de conservación reales. Muchos consumidores descartan unidades perfectamente comestibles por interpretar esa fecha de modo rígido. Este hallazgo redefine las prácticas de almacenamiento y consumo habituales.
El yogur, consumido en desayunos, meriendas y cenas ligeras, ofrece proteínas, calcio y probióticos beneficiosos para la salud intestinal. Su versatilidad lo convierte en aliñado de ensaladas, base de salsas y postre sano. Sin embargo, su vida útil depende tanto de la fórmula como de la temperatura de la nevera y del estado íntegro del envase.
2¿Qué significa “consumo preferente”?

La fecha de consumo preferente indica hasta cuándo el alimento conserva propiedades óptimas de textura, sabor y valor nutricional, pero no prohíbe su ingesta posterior. Tras ese día, el yogur puede perder firmeza y acidez, aunque seguir siendo comestible. La OCU detalla que este margen de flexibilidad evita desperdicios y fomenta una cultura de aprovechamiento.
Los consumidores deben verificar la integridad del envase, evitando aquellos con abolladuras o pérdidas de vacío. La OCU aconseja agitar ligeramente el producto antes de abrirlo y olerlo; cualquier olor agrio o extraño aconseja desecharlo. Mantener la nevera por debajo de 8 °C es clave para preservar la calidad más allá de la fecha indicada.