El argumento de Valle Salvaje llega a su cúspide en este nuevo capítulo, en el que las decisiones tomadas bajo presión van a marcar el destino de sus personajes. Mercedes y Bernardo han convertido su amor en un campo de minas, donde van a afrontar la voluntad de las consecuencias de haber traspasado las reglas de un mundo en el que rige tanto el poder como la apariencia. Aquello que un día fue un lazo de proximidad y de sinceridad es, actualmente, un lazo sin capacidad para escaparse de las consecuencias del dominio y de las traiciones deseadas.
2UN CORAZÓN HECHO PEDAZOS

Adriana ya no puede concebir su existencia en Valle Salvaje sin Rafael y la confirmación del compromiso de este con Úrsula representa el postrero colofón de la tragedia. Sus amigas, como hacen siempre de la manera más natural, Bárbara y Luisa, intentan consolarla, pero hay ocasiones en las que las palabras no llegan ni alcanzan a sanar ciertas heridas. La tragedia de Adriana es que su amor no tuvo nunca oportunidad en un mundo en el que los matrimonios se preparan en salsas, pero no en el corazón.
Rafael, encuadrado en las expectativas de su linaje no deja de ser otro prisionero del sistema, y su silencio a Adriana le duele más que el peor de los rechazos, porque confirma que ni el amor más inmenso puede embestir e ir contra la maquinaria de la tradición que no para y no cede. Mientras Adriana llora a la espera de un deseo que se consuma; el interrogante que queda es el siguiente: ¿existe un umbral por donde Rafael pueda decidir obedecer y comenzar a vivir?
Sin embargo, el sufrimiento de Adriana no es el único que se puede escuchar en este capítulo. Bárbara, una de las testigos de su desgarrador sufrimiento, parece haber encontrado en esta tragedia la chispa que faltaba para actuar. La decisión que toma respecto a Pedrito no es una muestra de bondad, sino un desafío directo a las estructuras que han regido sus vidas.
Y, mientras tanto, Don Hernando va avanzando como un jugador de ajedrez, teniendo en cuenta que su estrategia es perfecta, e incluso los mejores estrategas no pueden concebir el poder de un corazón herido, y Adriana puede ser la sorpresa que nadie había esperado.