La llegada del calor suele acompañarse de risas en la terraza y helados al atardecer, pero también es la señal de alarma para esos diminutos exploradores que se cuelan en nuestra casa: hormigas y cucarachas. Estos insectos aprovechan cualquier rendija para asaltar la cocina o anidar en zonas húmedas. Si estás cansado de los productos tóxicos y los olores agresivos, te alegrará saber que hay una alternativa sencilla y barata que usa algo tan común como el papel de aluminio.
Te aseguro que, una vez que pruebes esta técnica, no querrás volver a ver un spray químico cerca de la despensa. Mantén a mano unos cuantos trozos de aluminio y descubre cómo convertirlos en auténticas barreras contra estas plagas de verano.
6Cuándo recurrir a ayuda profesional

Si las cucarachas o las hormigas han instalado un campamento permanente y multiplican sus colonias, puede que este método casero se quede corto. En esos casos, lo más sensato es llamar a un servicio de control de plagas. Elos evaluarán el alcance de la infestación y emplearán técnicas seguras para tu familia.
Pero para invasiones leves y recurrentes, este truco natural es un primer paso muy económico y eficaz. Te ayuda a ganar tiempo y a reducir el uso de productos químicos, dejando para los profesionales sólo los casos extremos.