La celebración de la romería de El Rocío ha reunido esta semana a miles de personas en la aldea onubense de Almonte, donde la devoción, el ambiente festivo y la presencia de rostros conocidos se han mezclado como cada año. Entre las figuras más destacadas se encuentra Isabel Pantoja, que ha reaparecido en este enclave religioso cargado de significado para muchos andaluces. Su visita no ha pasado desapercibida: los comentarios sobre su aspecto físico, así como una actitud visiblemente emocionada ante la imagen de la Virgen del Rocío, han generado todo tipo de reacciones. Una de las más contundentes ha sido la de Dulce Delapiedra, la mujer que ejerció como niñera de Isa Pantoja y que ha vuelto a alzar la voz para señalar la dura contradicción que, a su juicio, representa ver a la artista llorando ante la Virgen mientras sigue sin tener relación con su hija.
1El estado de salud de Dulce

Las palabras de Dulce resonaron con fuerza este jueves 5 de junio, cuando el programa La familia de la tele difundía imágenes en las que se podía ver a Isabel Pantoja en actitud compungida, rezando y llorando frente a la Virgen. La que fuera empleada de confianza de la familia Pantoja no tardó en manifestar su indignación, remarcando que no entendía cómo alguien podía mostrarse tan afectada en un acto de fe mientras permanecía en silencio frente a su propia sangre. “¿Qué hace rezándole y llorándole a la Virgen? No se entiende. ¿Esa fe que tiene de pedirle tanto a la Virgen y no hablarle a su hija? No es normal”, decía con crudeza, visiblemente afectada por lo que considera una injusticia. En sus palabras había un trasfondo de tristeza por Isa Pantoja, quien atraviesa las últimas semanas de su embarazo sin contacto alguno con su madre, algo que Dulce considera profundamente doloroso.
Sin embargo, la preocupación en torno a Dulce no se ha limitado a sus declaraciones. Este viernes 6 de junio, apenas un día después de su dura intervención, la exniñera ha sido víctima de un serio contratiempo de salud mientras se encontraba precisamente en El Rocío, donde tenía previsto entrar en directo en el mismo programa para seguir hablando sobre Isabel Pantoja. Según ha relatado la reportera Marta Riesco, que estaba con ella en ese momento, Dulce comenzó a sentirse indispuesta justo antes de subirse a un coche de caballos preparado para la conexión. Aunque inicialmente parecía que podía tratarse de una bajada de tensión pasajera o un momento de estrés, lo cierto es que la situación derivó rápidamente en un desmayo que alarmó tanto al equipo del programa como a los peregrinos que la acompañaban.
Se me va a salir el corazón», explicaba Riesco en directo, aún alterada por lo ocurrido. “Estábamos hablando con normalidad, incluso planeando el paseo, cuando de repente se ha desplomado. Al principio creí que podía estar bromeando, porque hasta hacía un segundo estaba bien, pero rápidamente me di cuenta de que no fingía. Lo hemos pasado bastante mal”, confesó. Las imágenes del momento fueron difundidas por el programa, mostrando cómo Dulce caía al suelo, sin conocimiento, ante la mirada atónita de los allí presentes. Algunos asistentes acudieron rápidamente a auxiliarla y la trasladaron al interior de una casa cercana, donde pudo recibir asistencia básica mientras llegaban los servicios sanitarios.