El dolor de espalda al despertar es una queja demasiado frecuente, una molesta bienvenida al nuevo día que muchos achacan al colchón, al estrés o a una mala noche sin más. Sin embargo, lo que pocos sospechan es que el verdadero culpable podría estar oculto en la postura que adoptamos inconscientemente durante esas siete u ocho horas de supuesto descanso. Existe una forma de dormir que, lejos de reparar el cuerpo, lo somete a una tensión innecesaria, preparando el terreno para un amanecer cargado de molestias y rigidez.
Esa postura nocturna, aparentemente inocente para algunos, no es otra que dormir boca abajo. Aunque pueda parecer cómoda en un primer momento, esta posición ejerce una presión considerable y antinatural sobre la columna cervical y lumbar, dos de las zonas más vulnerables de nuestra estructura ósea. Entender por qué esta costumbre puede estar destrozando tu bienestar es el primer paso para evitarla y despertar, por fin, sin ese lastre matutino que condiciona el resto de la jornada y que tanto afecta a la calidad de vida.
5CAMBIAR EL HÁBITO: TRUCOS PARA DEJAR DE DORMIR BOCA ABAJO Y SALVAR TU ESPALDA

Cambiar un hábito de sueño tan arraigado como la postura al dormir puede ser un desafío, pero no es imposible y los beneficios para la espalda merecen el esfuerzo. Una estrategia efectiva, aunque algo rudimentaria, es coser una pelota de tenis en la parte delantera del pijama; esto hará que, si instintivamente intentas girarte boca abajo durante la noche, la incomodidad te despierte o te haga cambiar de postura de forma refleja. Con el tiempo, el cuerpo se irá acostumbrando a las nuevas posiciones.
Otra técnica consiste en utilizar almohadas estratégicamente para crear barreras físicas que dificulten girarse. Colocar una almohada grande a lo largo del cuerpo, abrazándola, puede ayudar a mantenerse de lado. La paciencia y la constancia son claves, ya que el proceso de reeducación postural puede llevar varias semanas. Recordar los perjuicios de la postura anterior y los beneficios de una nueva puede ser una gran motivación para perseverar y conseguir, finalmente, un descanso reparador y una espalda libre de dolor al despertar.