El presidente de Indra, Ángel Escribano, admitió a finales del pasado mes de febrero que «le estaba dando una vuelta» a lo de vender Minsait, la joya dedicada a las nuevas tecnologías del grupo.
Tras conocerse la existencia de conversaciones para la venta de la división de externalización de servicios a empresas BPO a Servinform, y de la división de pagos Nuek a Pollen Street Capital, se confirma que se venderán algunas divisiones de Minsait, para concretar su diversificación de negocios, deshacerse de los menos rentables o que enfrentan competencia más feroz y así centrarse en los negocios de mayor valor añadido de la exitosa división de servicios tecnológicos de Indra.
Ya en febrero, durante la presentación de resultados de Indra en 2024, tanto su presidente, como su CEO, José Vicente de los Mozos, confirmaron que Minsait supone el 60% de los ingresos de Indra, y que creían en el papel y el futuro de la división tecnológica. Escribano días después admitió en una comparecencia en el Congreso de los Diputados que Minsait no se vendía. Sin embargo, sí que se van a vender aquellas líneas de negocio menos rentables.
Según ha publicado Expansión, Indra está negociando la venta de su división de externalización de servicios, conocida como BPO, a Serviform, una firma española de servicios de digitalización para empresas que acaba de ser adquirida por el fondo anglosuizo AS Equity Partners, y de entrada la operación se ha valorado en unos 100 millones de euros. BPO es una división centrada en la externalización de procesos de negocio, principalmente Back Office y Front Office especializados, «donde la tecnología y el conocimiento son clave», según la descripción de la compañía.
Escribano días después admitió en una comparecencia en el Congreso de los Diputados que Minsait no se vendía. Sin embargo, sí parece que se van a vender aquellas líneas de negocio menos rentables
BPO incluye servicios de gestión hipotecaria, servicios financieros, para energéticas y empresas de telecomunicaciones, entre otros sectores, y asegura ofrecer «soluciones de Business Process Outsourcing (BPO) tanto para procesos completos (Full BPO) como para tareas específicas (Out Tasking).
Los analistas de la financiera Renta 4 se han apresurado a indicar que BPO es «un segmento de negocio con márgenes bajos y que Indra lleva años interesada en vender», sin embargo indican también que «aunque Indra no desglosa las cifras de BPO, su EBITDA podría rondar los 15 millones de euros. Así, los especialistas financieros se mantienen a la expectativa de conocer si finalmente se cierra la operación. Además, creen que «sería una buena noticia para Indra al conseguir vender una división que se reestructuró bajo el equipo directivo de Fernando Abril-Martorell y que ha estado en venta desde hace años».
«BPO es un segmento de negocio con márgenes bajos y que Indra lleva años interesada en vender»
En cuanto a la venta de la antigua Minsait Payments, ahora bajo la nueva denominación de Nuek desde el pasado mes de marzo para presentarla como un negocio con «mayor dinamismo, innovación, confianza y cercanía» con la estrategia de mayor crecimiento y especialización, «que busca fortalecer su autonomía, capacidad de innovación y posición como líder en el ecosistema de pagos», es la gestora británica Pollen Street Capital la que está negociando la operación, por la que Indra quiere conseguir 500 millones de euros.
Con las dos ventas la compañía trabaja en su objetivo de abandonar negocios que no aportan valor a las áreas de defensa y aeroespacial, con las que Indra quiere convertirse en el «campeón nacional» de ambos negocios.

SANTA BÁRBARA, FIRME ANTE INDRA
Para llegar a ser ese buque insignia en el área de defensa, uno de las pretensiones de Indra era comprar Santa Bárbara Sistemas. Sin embargo, la compañía dueña de las fábricas situadas en Sevilla y Oviedo, General Dynamics, ha presentado este jueves su «Plan Industrial y Tecnológico 2025-2030», que claramente cierra la puerta a la adquisición de su filial española.
Indra manifestó hace 3 meses su interés de comprar Santa Bárbara Sistemas, pero General Dynamics tiene otros planes, ya que ha anunciado que aumentará la capacidad de producción de vehículos terrestres, ampliando su presencia en nuevas regiones como Aragón, Cataluña y País Vasco para convertirse en la empresa líder de vehículos blindados terrestres en España, de manera que pretende duplicar su producción de blindados y su plantilla en nuestro país.
Precisamente uno de los pilares de su plan estratégico gira en torno al 8×8, vehículo blindado fabricado por Tess Defense, controlada por Indra con un 51% del capital y donde General Dynamics tiene una participación significativa del 17%.
general Dynamics planta cara a Indra y anuncia que aumentará la capacidad de producción de vehículos terrestres, ampliando su presencia en nuevas regiones como Aragón, Cataluña y País Vasco para convertirse en la empresa líder de vehículos blindados terrestres en EspañA
Los analistas financieros de Bankinter entienden que este plan presentado por la compañía norteamericana es una «mala noticia para Indra», al cerrar totalmente la puerta a la posible adquisición de la tecnológica española de la codiciada Santa Bárbara. Según Bankinter «esto implica que de los 565 vehículos que Santa Bárbara estima fabricar para 2030, Indra únicamente capturaría los ingresos del 8×8 que fabrica Tess Defense», ya que si Indra hubiera completado la adquisición, habría aumentado su capacidad industrial, participación en Tess Defense y sinergias con otras líneas de negocio, «ya que Indra integra, entre otros, los sensores del 8×8».
Con el plan presentado, Santa Bárbara se postula como primera compañía en el desarrollo de vehículos blindados terrestres, y al no poderla comprar, Indra se encuentra con que, al contrario, supone para ella un aumento de la competencia en el sector defensa español. Santa Bárbara Sistemas emplea a más de 1.000 personas en España y ha sido clave en el desarrollo del blindado 8×8 «Dragón» un programa financiado por el Ministerio de Defensa con una presupuesto de más de 2.000 millones de euros.
No obstante, en cuanto a la valoración financiera, desde Bankinter continúan recomendando comprar acciones de Indra, que sitúan en un precio objetivo de 36,8 euros, porque creen que la compañía va a continuar beneficiándose del «aumento estructural del gasto en defensa por parte de los gobiernos europeos» (entre ellos España, que previsiblemente aumentará el gasto en defensa hasta el 2% del PIB o superior) como consecuencia de un entorno geopolítico más incierto, debido al conflicto entre Rusia y Ucrania, y la intervención de la administración Trump tanto en los conflictos armados como en el orden comercial global.
También es favorable a Indra del mayor peso en su modelo de negocio «del segmento de defensa en el medio plazo, que presenta tasas de crecimiento en ventas más dinámicas que el resto de las divisiones y unos márgenes superiores».