La inflación de la eurozona ha sorprendido a la baja. Tras un aumento del 2,2% en abril, el coste de la vida aumentó tan solo un 1,9% en mayo, el menor incremento desde septiembre de 2024. Esto confirma, si es que había alguna duda, que el Banco Central Europeo (BCE) bajará los tipos de interés oficiales 25 puntos básicos en su reunión de mañana.
Donde ya no hay tanto consenso es en lo que la entidad decidirá próximamente o en hasta dónde llegarán las bajadas, pues hay quien las sitúa incluso en el 1%. Mucho dependerá de las discusiones sobre los aranceles recíprocos que tienen fecha límite el 9 de julio. Esto es lo que opinan algunos de los economistas consultados por Merca2.
Hugo Le Damany y François Cabau, Economista y Economista Senior para la Eurozona de AXA Investment Managers, señalan que el resultado de las discusiones sobre aranceles antes de la fecha límite sobre el comercio (aranceles recíprocos) será clave para justificar la necesidad de continuar con los recortes de tipos consecutivos en julio. Una vez alcanzado el «nivel neutral», las discusiones en el CG serán más difíciles, pero cualquier resultado desfavorable de las conversaciones comerciales probablemente inclinaría al BCE hacia otro recorte de tipos consecutivo.
A la espera de lo anterior, seguimos convencidos de que el BCE tendrá que recortar aún más los tipos, hacia territorio acomodaticio. Seguimos previendo un recorte del tipo de interés de depósito al 1% en diciembre, por debajo de las expectativas del mercado.
El fin del excepcionalismo estadounidense y los cambios sísmicos mundiales
Felix Feather, Economista de Aberdeen Investments, explica que “esperamos que los tipos se sitúen en un nivel neutral del 2,0% tras el anuncio de la decisión del Consejo de Gobierno”.
Y que “es probable que esta medida no sea la última del ciclo, ya que los responsables de la política monetaria tendrán que seguir apoyando la economía una vez que se hayan dejado sentir todos los efectos de los cambios en la política arancelaria estadounidense.
El abaratamiento del petróleo, la fortaleza del euro y la relajación de los mercados laborales mantendrán la inflación contenida a corto plazo, incluso si la UE toma represalias contra EE.UU. con sus propias medidas arancelarias. Por lo tanto, esperamos un nuevo recorte de tipos en septiembre, lo que llevaría los tipos a un territorio abiertamente acomodaticio.”
Esperamos un nuevo recorte de tipos en septiembre, lo que llevaría los tipos a un territorio abiertamente acomodaticio, Aberdeen

El 2% es el nivel neutral ¿qué pasará después?
Annalisa Piazza, analista de investigación de renta fija de MFS Investment Management señala que “la dependencia de los datos seguirá siendo el principal motor de las decisiones políticas, con la ligera salvedad de que los tipos de interés oficiales serán más «neutrales» que antes, lo que eleva el umbral para aplicar recortes adicionales de forma consecutiva.”
“Esperamos una pausa en la reunión de julio (a menos que no haya signos de mejora en las negociaciones arancelarias), seguida de una nueva flexibilización en septiembre y, posiblemente, otra en el cuarto trimestre. Proyectamos que los tipos terminales se sitúen en torno al 1,5 %. Actualmente, los mercados descuentan dos recortes en los próximos seis meses y un nivel final cercano al 1,65 %.”
Daniel Loughney, director, responsable de Renta Fija para MIFL (Mediolaum International Funds) recuerda que “según el mercado, el BCE pondrá fin a los recortes de tipos a principios de 2026, situándolos en el 1,5%, lo que nos parece razonable. Sin embargo, diferimos del mercado en cuanto al tiempo que el BCE permanecerá a la espera a partir de entonces. El mercado espera que el BCE empiece a revertir los recortes de tipos a mediados de 2026, mientras que nosotros creemos que el banco central mantendrá los tipos más bajos durante más tiempo«.
El mercado espera que el BCE empiece a revertir los recortes de tipos a mediados de 2026
Por su parte, Konstantin Veit, gestor de carteras de PIMCO, apunta que “más allá de junio, creemos que los debates del Consejo de Gobierno se centrarán probablemente en la orientación adecuada de la política monetaria en el futuro y, en particular, en si será necesario adoptar finalmente una postura claramente acomodaticia para evitar que la inflación se sitúe por debajo del objetivo de estabilidad de precios a medio plazo.”
“El entorno actual deja poco margen para la orientación futura. Esperamos que el Consejo de Gobierno mantenga una postura reactiva en lugar de proactiva y siga reiterando que los datos disponibles determinarán el curso de acción en futuras reuniones”.

Por último, David Zahn, responsable de renta fija europea en Franklin Templeton, apunta que «es poco probable que los aranceles del 10–20% afecten de manera significativa al crecimiento o a la inflación en Europa, debido a la fortaleza del euro y a la fijación de precios de las materias primas en dólares, a diferencia de EE. UU., donde el impacto es claramente inflacionista.”
“Aunque el crecimiento a corto plazo podría debilitarse debido a la incertidumbre, se espera una recuperación a partir de 2026, lo que cambiaría el enfoque de la política monetaria desde los recortes hacia posibles subidas. Por otro lado, el aumento del gasto en defensa apunta a un cambio fiscal de largo plazo, en línea con patrones observados de décadas anteriores cuando había un elevado gasto público».
¿Qué hará en junio el BCE?
Martin Wolburg, economista senior en Generali Investments, por su parte, afirma que “los últimos comentarios indican que el debate sobre nuevas medidas políticas en el seno del CG se ha intensificado. Esperamos que los riesgos de guerra comercial aboguen a favor de una mayor relajación.”
Por lo tanto, “prevemos otro recorte de 25 puntos básicos el 5 de junio. Aunque seguimos esperando un recorte final al 1,75%, la presidenta Lagarde debería hacer hincapié en la dependencia de los datos y dejar deliberadamente abierto el momento del recorte final.”
Y Felipe Villarroel, socio, gestión de carteras en TwentyFour AM (Vontobel) añade: “la reunión en sí no parece que vaya a entrar en los anales de la historia, pero merece la pena considerar que este recorte podría convertir al BCE en el primer banco central de un mercado desarrollado en alcanzar su tipo terminal, es decir, el punto más bajo alcanzado en un ciclo determinado.”
“Por lo tanto, una reunión sin incidentes a primera vista, ya que se da por descontado un recorte de los tipos de depósito de 25 puntos básicos. Sin embargo, no hay que perder de vista las nuevas proyecciones macroeconómicas, ya que podrían alterar la opinión del mercado sobre la orientación de la política monetaria en el futuro”, concluye.