viernes, 6 junio 2025

El convenio que utiliza Glovo para sus riders no permite que usen la bicicleta

Poco a poco, y con tropiezos, ha ido avanzando el proceso de contratación de los repartidores de Glovo. Entre los contratos directos que los riders empiezan a firmar a través de la aplicación, y las flotas que han hecho movimientos para contratar una parte de los autónomos que hasta ahora eran los encargados de operar los pedidos del controvertido unicornio español. Además, ha medida que se han ido publicando datos se han hecho evidentes condiciones como horario y sueldo, pero hay un dato, publicado por la propia Glovo, que puede ser especialmente dramático.

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La empresa ha confirmado que el contrato de los repartidores está atado al convenio vigente de mensajería, firmado en 2006. Es un convenio que no está pensado para el volumen ni el tipo de trabajo de los riders actuales, y un dato puntual los castiga: Es un convenio que obliga al «mensajero» a ocuparse tanto de adquirir como del mantenimiento de su vehículo de trabajo, sea una moto o una bicicleta. 

Es cierto que es una decisión que, al menos para esta primera tanda de repartidores contratados, tiene sentido. Los riders que operan en la plataforma de Glovo actualmente han sido autónomos hasta hace muy poco tiempo, y la mayoría de ellos todavía lo son, por lo que son dueños de sus vehículos. 

El problema es que el convenio sobre el que se trabajan los nuevos contratos no solo exige a los repartidores ser dueños de sus bicicletas, sino que se les obliga ser responsables del mantenimiento de los mismos. Así lo resume el capítulo 5 del BOE  296, publicado el 12 de diciembre de 2006, «El trabajador que ostente la categoría de mensajero deberá ser titular o poseedor de un vehículo a motor de dos o cuatro ruedas en buenas condiciones de uso así como estar en cada momento habilitado legalmente para su conducción».

Además, según el mismo texto, se les exige a estos trabajadores a reportar a la empresa en caso de que el vehículo tenga una avería que evite que pueda ser usado para trabajar. «El trabajador deberá dar cuenta a la central inmediata y telefónicamente, de cualquier anomalía producida durante la realización de su trabajo, así como de cualquier avería sufrida por el vehículo empleado», se lee en el BOE. Solo esos dos datos son preocupantes para los repartidores que siguen intentando adaptarse a un nuevo modelo de trabajo con Glovo, todo en el comienzo del verano, que es siempre una temporada complicada para su sector. 

LOS SINDICATOS PONEN EL OJO EN EL PROCESO DE CONTRATACIÓN

Lo cierto es que los grandes sindicatos de España ya han empezado a mover ficha alrededor del nuevo contrato de Glovo. Todavía no han entrado de lleno a exigir un nuevo convenio colectivo para el sector, como el que existe en otro tipo de plataformas digitales como las VTC, pero ya han exigido que las flotas no se encargan de contratar a los repartidores, pues lo consideran una tercerización del servicio y una forma del unicornio español de ignorar las responsabilidades que van de la mano de esta situación. 

App de Glovo. Fuente: Agencias
App de Glovo. Fuente: Agencias

Ya han organizado una primera protesta, el pasado Primero de Mayo, y han asegurado que varias de las empresas que hoy ofrecen a los repartidores trabajar como parte de una flota ya tenían preparados sus contratos desde noviembre del año pasado, un mes antes del anuncio de Glovo de que solo trabajan con repartidores con contrato. Esto además ocurre mientras que Oscar Pierre ya enfrenta una denuncia de fiscalía por una supuesta violación de los derechos del trabajador. Es una situación que hace que un conflicto laboral sea especialmente delicado, y que aumenta el deseo de evitar una nueva confrontación para una empresa que ha lidiado con demasiadas de estas.

EL LENTO PROCESO DE GLOVO SIGUE AVANZANDO

De todos modos, a pesar de las dudas y de los problemas que tendrán que asumir en el futuro inmediato, el proceso de contratación de Glovo no se ha detenido. Combinando el uso de flotas y de repartidores con contratos directos, la empresa espera mantenerse como una de las más populares de su sector, y que su nuevo modelo mantenga la capacidad operativa para atender a todos los usuarios que se mantienen en la plataforma. 

De cualquier modo, se mantiene la incógnita de uno de sus grandes competidores. Uber Eats está por convertirse en la única empresa del sector que sigue operando con autónomos, y esto la pone en una situación especialmente compleja, pues es de esperar que la presión que hasta hace poco se mantenía sobre Glovo pase ahora a su principal competidor. 


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