La dgt ha anunciado que, a lo largo de 2025, se instalarán 122 nuevos radares en toda España, una noticia que ha pillado por sorpresa a muchos conductores. Esta iniciativa pretende reducir la siniestralidad en los tramos más conflictivos, pero también ha generado confusión porque los puntos exactos de ubicación no siempre están claros ni debidamente señalizados.
Con el despliegue ya en marcha, quienes circulan por carreteras interurbanas deben familiarizarse con los cambios en la vigilancia de velocidad. La dgt asegura que este plan redundará en más seguridad, pero hay quienes temen que, al no conocer todos los sitios donde se colocan los radares, acaben recibiendo sanciones inesperadas.
1Estrategia de ubicación de los nuevos radares de la DGT

La dgt ha escogido regiones con altas cifras de accidentes para colocar buena parte de los dispositivos. Comunidades como Madrid, Castilla y León, Andalucía y Valencia recibirán la mayor parte del despliegue.
Este plan no se basa en azar, sino en un análisis exhaustivo de tramos con elevada siniestralidad. Sitios identificados como peligrosos o donde se detecta un gran volumen de velocidad excesiva son ahora prioridad para la dgt, que busca reducir el número de víctimas viales a través de una presencia más activa de radares secretos.