jueves, 29 mayo 2025

‘La Promesa’: Leocadia quiere apoderarse de los bebés recién nacidos

El martes 27 de mayo, La Promesa nos presenta a un capítulo en el que se destrozan las lealtades y las ambiciones aparecen disfrazadas de pactos. Leocadia, siempre fría, ha dado con los recién nacidos de Catalina y Adriano como la clave para su siguiente paso. Lo que pasa por ser un pacto con el duque de Carvajal y Cifuentes se revela como una jugada en la que los inocentes sirven como moneda de cambio.

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A la vez que las verdades ocultas empiezan a quebrarse: Jacobo es desenmascarado por Curro; Eugenia no para en su lucha contra los efectos del Laudano; Martina lleva a cabo una duda entre su promesa hecha al duque. En este capítulo, nadie queda libre de las mentiras que habitan en los muros de La Promesa.

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EL MALVADO PLAN DE LEOCADIA

La Promesa': Leocadia quiere apoderarse de los bebés recién nacidos
Fuente: RTVE

La ambición desmesurada que Leocadia siente por el poder en La Promesa carece de límites. La mujer ha llegado hasta el punto de decidir emplear a los bebés recién traídos a la vida como elemento de su pacto con el duque. En una arriesgada vuelta de tuerca, la mujer establece que los vástagos de Catalina y Adriano sean la forma de concretar un pacto indefectible. Pero, ¿qué hay detrás de tal jugada? Hay quien presiente que Leocadia está amarrándose con este truco; y otros sostienen que los bebés podrían convertirse en prisioneros de guerra en una guerra fría.

Catalina, aún disminuida por el cansancio del parto, desconoce toda artimaña urdida a sus espaldas. No obstante, su instinto de maternidad comienza a dar la voz de alarma de que algo no cuadra. Cada vez que Leocadia se aproxima a los pequeños con una sonrisa envenenada, empieza a sentir un escalofrío en la espalda. ¿Conseguirá descubrir la verdad antes de que sea demasiado tarde? Adriano sigue atado a su guerra interior entre la lealtad y la energía del amor. De saber qué se cocina bajo el abrigo de Leocadia, su fidelidad hacia la familia estaría rota por completo.

En este punto, aunque parece que el duque está de acuerdo con la oferta de Leocadia, su mirada parece decantarse por algo más que por lo que irremediablemente expresa. ¿De verdad se piensa que ese pacto será en su beneficio, o se está jugando una carta que debe ocultar? Hay quienes dicen que el duque no se fía del todo de nadie y que en el pacto entre él y Leocadia puede existir un chantaje mutuo. En La Promesa, hasta los pactos más ricos sí pueden llegar a ser una farsa. Y mientras los bebés dormitan inocentes en la cuna, su futuro depende de un hilo.

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