La realidad de Ouigo sigue siendo delicada, pero lo cierto es que la empresa empieza a tener motivos para celebrar. La empresa francesa de trenes con billetes de bajo precio tiene este año su primer año a la capacidad óptima que esperaban en España, y apuestan a que por fin conseguirán buenos resultados y que este será el año en el que finalmente tengan un margen operacional positivo. Es una buena noticia para la empresa, para la apuesta europea por la liberalización de sus servicios y para los usuarios que siguen apostando más por los trenes desde que se liberalizó la alta velocidad en el país.
Pero no necesariamente lo es para el Ministro de Transporte y Movilidad Sostenible. Óscar Puente ha considerado a Ouigo el enemigo público número 1, asegurando que sus precios tan bajos han obligado a Renfe, y en menor grado a Iryo, a reducir sus precios, lo que se ha traducido, según el ministro, en pérdidas para todo el sector. La realidad es que en la mayoría de las rutas, al menos durante 2024, el precio más bajo ofrecido venía del AVLO, la opción de bajo costo de la propia Renfe. Aun así, el ministro había prometido presentar un informe en la Comisión Europea para demostrar la competencia desleal por parte de la empresa francesa.
Pero el informe nunca se presentó, con el porcentaje del mercado de Ouigo en territorio español haciendo imposible la denuncia. El ministro, sin embargo, está esperando otra posibilidad, que la empresa francesa deba pedir ayuda a su matriz, la Sociedad Nacional de Ferrocarriles Francesa (SNCF), la empresa pública francesa cuyo apoyo directo podría ser considerado una subvención estatal, que requeriría la aprobación de la Dirección General de Competencia de la Comisión Europea, hoy dirigida por Teresa Ribera.
Sin embargo, en Ouigo aseguran que esto no ocurrirá. La empresa sabe que sus primeros años operando en territorio español han resultado en pérdidas, pero cuentan con que la situación cambiará. Además, se suma que defienden que el apoyo que han recibido desde la SNCF han sido préstamos e inversiones que cumplen con la normativa de la UE.
«La financiación de OUIGO se realiza siempre en condiciones estrictas de mercado. Tanto la legislación sobre ayudas de Estado como la fiscalidad vigente impiden cualquier tipo de subvención cruzada entre SNCF y OUIGO. El consejo de administración de OUIGO y su comité de dirección tienen un mandato y unos objetivos financieros y comerciales claros, orientados a hacer de OUIGO una empresa rentable para el grupo SNCF. Todas las inversiones y préstamos recibidos se otorgan a precios de mercado, con intereses y bajo control de auditoría independiente, cumpliendo la normativa europea y española», ha explicado la empresa a este medio.
EL DUELO DE LOS TRENES DE FRANCIA Y ESPAÑA
La realidad es que la mala relación entre Puente y la empresa francesa puede tener mucho más que ver con la decisión del gobierno galo de dificultar la llegada de Renfe a París. Lo cierto es que entre homologaciones, exigencias de seguridad y decisiones legales han hecho que sea cada vez más complicado dar el paso y empezar a conectar la Ciudad Condal y la Ciudad Luz. Es que mientras que a la empresa pública española no se le permite llegar a la capital de Francia, su equivalente galo no solo llega a Barcelona, sino que la conexión entre ambos no hace más que aumentar su número de pasajeros.

En cualquier caso, es una situación que ha llegado al extremo. Hace poco la propia Renfe amenazó con dejar de lado los viajes a Toulouse, lo que ha hecho que los franceses vuelvan a abrirse a negociar y hablar con el ministerio de transporte español. Sin embargo, todavía se mantiene la tensión y por ahora sigue salpicando también la relación del operador low cost con Adif, aunque a pesar de todo Ouigo sigue teniendo un peso importante en el mercado local.
OUIGO DEFIENDE SU PESO EN LA ECONOMÍA ESPAÑOLA
En cualquier caso, además de asegurar que no ha hecho nada que afecte a Renfe, más allá de competir con la empresa estatal en un mercado que ha crecido tras la liberalización, Ouigo defiende que su llegada ha fortalecido la industria ferroviaria. Además, señalan que no solo es por el aumento de viajeros en las vías españolas.
«La sociedad española se beneficia de nuestra apuesta, ya que además de ofrecer precios competitivos, contribuimos a la inversión y creación de empleo en el país. Actualmente, somos 450 empleados y generamos otros 2.000 puestos de trabajo indirectos. 2025 será nuestro primer año con margen operacional positivo, lo que demuestra que nuestras operaciones ya generan beneficios y que somos una empresa rentable», ha asegurado la empresa.
Será importante seguir de cerca el dato. Ouigo tiene razón en que el mercado de la alta velocidad en España no ha hecho más que crecer en los últimos años, pero también es cierto que este año, con los tres competidores del sector ya establecidos, se trata de una prueba de fuego para las tres empresas.