La infanta Cristina y Iñaki Urdangarin han protagonizado un inesperado acercamiento años después de firmar su divorcio. A pesar de haber tomado caminos separados y de que él rehizo su vida sentimental con Ainhoa Armentia, ambos han demostrado que, cuando se trata del bienestar de sus hijos, las diferencias personales quedan en un segundo plano. El encuentro se produjo recientemente en Barcelona, ciudad que se ha convertido en el centro de operaciones de Cristina desde que recompró un piso en la zona de Pedralbes y comenzó una reforma integral del inmueble. Esta nueva etapa de su vida coincide con un aumento de su presencia en España, tanto por razones profesionales como familiares.
2Iñaki Urdangrin se acerca a su exmujer

Este acercamiento puntual entre la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin ha llamado la atención por lo infrecuente de la situación. Desde hace meses, e incluso años, no se les veía juntos ni se tenía constancia de encuentros privados. En esta ocasión, la coincidencia en fechas en Barcelona no fue casual. Mientras que Cristina se alojó en un hotel cercano a las oficinas donde trabaja, Urdangarin, según se entiende, pernoctó en casa de su hijo. La reunión demuestra que, pese a la separación y a la nueva vida de él junto a Ainhoa Armentia, ambos mantienen una relación cordial cuando se trata de temas familiares.
El encuentro no implica una reconciliación sentimental, pero sí evidencia una actitud madura y conciliadora por parte de ambos. La infanta Cristina continúa volcada en sus hijos y en su nueva etapa de vida, marcada por una mayor presencia en España y por la progresiva normalización de su relación con el resto de la familia real. Urdangarin, por su parte, mantiene su vida en el País Vasco, pero no duda en estar presente en los momentos importantes de sus hijos. El tiempo parece haber limado asperezas, y si bien no volverán a compartir una vida en común, sí están dispuestos a colaborar por el futuro de quienes más les importan.
Este giro en la relación entre la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarin también refleja un cambio de paradigma en la imagen pública que ambos quieren proyectar. Tras años marcados por la polémica y la distancia, ahora priorizan la estabilidad familiar y la discreción. Esta nueva dinámica no solo beneficia a sus hijos, sino que también contribuye a suavizar la tensión mediática alrededor de ambos, mostrando un lado más humano y cercano de dos figuras que, a pesar de las circunstancias, siguen vinculadas por un lazo indisoluble: la familia.