Sacar a tu perro a pasear puede ser la mejor terapia para ambos: aire puro, ejercicio y complicidad compartida. Sin embargo, ¿sabías que dedicar apenas unos minutos de atención al inicio del paseo potencia su entusiasmo y refuerza vuestra relación?
En este artículo descubrirás un método sencillo y auténtico para que tu compañero peludo disfrute como nunca de su libertad, y sobre todo, para que vuelva a tu lado con felicidad desbordante cada vez que le llames.
5Usa un tono divertido en tus llamadas

En lugar de un “ven” seco, prueba “¡a ver si me alcanzas!” o un “¡prepárate para la carrera!”. Esa chispa de humor convierte tu llamada en un juego, un reto amistoso que despierta su motivación.
Cuando te responde, acompaña la voz con palmadas suaves o un leve zapateo, aumentando su emoción y reforzando la idea de que volver a ti es la mejor parte del paseo.