Sentarte a la mesa con la convicción de comer sano resulta sencillo, pero la OCU acaba de plantar una semilla de duda en muchos de nosotros. Su última advertencia no se limita a cifras o tecnicismos: cuestiona el modelo de consumo de carne que creíamos inofensivo y nos empuja a repensar cada bocado.
En este artículo descubrirás cómo un informe de la OCU redefine lo que creías normal en tu dieta, te revelará el impacto silencioso en tu salud y el planeta, y te mostrará por qué ya no podrás mirar tu plato con los mismos ojos.
3Desequilibrios nutricionales y riesgos ocultos

Comer más proteína de la que necesitas no te hace más fuerte: te debilita. El exceso de carne roja se vincula con inflamación, alteraciones digestivas y un aumento de radicales libres que danan tus células.
La OCU advierte que, al moderar el consumo de carne, tu sistema digestivo recupera su equilibrio, mejora la absorción de nutrientes y reduce la presión en órganos vitales. Ese pequeño cambio se traduce en un bienestar que notas en cada paso.