Sueños de Libertad sigue provocando pasiones, amores prohibidos y conflictos familiares que mantienen a los televidentes expectantes todas las tardes. Cada capítulo de la ficción española es una montaña rusa de sentimientos, donde los personajes se encaminan entre traiciones, deseos ocultos y decisiones que modificarán el resto de sus vidas.
Esta semana, la historia sigue desarrollándose: hay relaciones clandestinas, luchas por la custodia de Julia, negocios en peligro y perfumes que podrían salvar —o hundir— el futuro de la familia Merino.
3NEGOCIOS, PERFUMES Y TRAICIONES

Luis es incapaz de tomar decisiones en Sueños de Libertad. El nuevo perfume, contrariamente a lo que indicaban las previsiones, no avanza y su orgullo le ha logrado impedir pedir ayuda hasta ahora. Pero Tasio ha conseguido que se decida a recurrir a las chicas de la tienda. «Reconocer un error duele, pero perseverar en él es la tortura», y Luis recién así logra entender que el trabajo en grupo podría muy bien convertirse en su salvación.
Su disculpa, algo que prácticamente no puede sí, introduce un cambio inesperado en su carácter. En el otro flanco, Floral se apresta para dar el golpe de gracia. Marta y Andrés celebran en secreto la caída de Don Pedro mientras la alianza con Galerías Miranda se esfuma. Don Pedro ahora está pagando las consecuencias de sus maquinaciones.
Sin embargo, Marta equivoca el camino y le pide a su hermano que se ocupa de desenterrar el legado de Fina. Un gesto, todo, hay que decirlo, pero que no deja de sorprender a Pelayo, que ve de inmediato otra disputa explosiva. Aunque no todas son pérdidas en el mundo de los negocios.
Fermín, renovado y comprometido a no fallar de nuevo, podría ser ese último engranaje que solidificara el futuro de Floral. «La segunda oportunidad no es un regalo, sino una prueba a la que te somete la vida», y Fermín parece listar para ello.