Cuando vas al mercado pensando en una cena ligera, pocas cosas resultan tan versátiles como un buen pescado fresco. Sin embargo, a veces lo más económico puede esconder sorpresas desagradables, tanto en sabor como en seguridad alimentaria. La OCU ha descubierto un establecimiento donde la calidad brilla por su ausencia, y quiere advertirte para que evites males mayores.
Este organismo, siempre atento a la protección del consumidor, ha analizado decenas de supermercados para orientar tu compra. No se trata solo de precio, sino de un equilibrio entre frescura, limpieza e incluso tiempos de espera en la pescadería. Con sus resultados, la OCU te ayuda a decidir con cabeza y a que tu próxima elección sea realmente satisfactoria.
1Así evaluó la OCU los supermercados

La metodología empleada por la OCU se basa en la opinión directa de más de 4.000 clientes, junto con inspecciones en 38 establecimientos distintos. Cada tienda recibió una puntuación que integra desde la variedad de especies hasta la higiene de los mostradores. Este enfoque integral revela más que una simple fotografía de precios; identifica dónde merece la pena invertir tus euros y dónde no.
El estudio también tuvo en cuenta aspectos como la organización del espacio y la atención al cliente en la sección de pescados. En un mercado donde la confianza en el proveedor lo es todo, la OCU ha dado voz a quienes compran a diario y ha combinado esas experiencias con sus propios criterios técnicos.