Los resultados del primer trimestre de Iberdrola confirmaron que su monstruosa deuda había aumentado un poco más. Por lo tanto, estaba más que cantado que se avecinaba desinversión, como ha acabado ocurriendo: la eléctrica ha firmado un acuerdo con la empresa australiana de servicios financieros MacQuarie para vender el 100% de su negocio de contadores inteligentes en Reino Unido.
Mediante la operación, Iberdrola traspasará la propiedad de la empresa depositaria de dichos activos, SP Smart Meters Assets Limited (SPSMAL), una vez la autoridad de Competencia británica dé su aprobación. SPSMAL está valorada en aproximadamente a 900 millones de libras, unos 1.060 millones de euros al cambio actual, y gestiona casi tres millones de contadores en las islas.
Según anunció Iberdrola en un comunicado, está previsto que la transacción se complete en el tercer trimestre del presente año.
LA TRANSACCIÓN, QUE SE PREVÉ ESTARÁ COMPLETA EN EL TERCER TRIMESTRE DE 2025, SUPONDRÁ EL TRASPASO DE SP SMART METERS, COMPAÑÍA VALORADA EN MÁS DE 1.000 MILLONES DE EUROS
Con esta adquisición, MacQuarie refuerza todavía más su presencia en este mercado, donde ya tiene un gran peso: la financiera australiana es actualmente uno de los mayores proveedores de contadores eléctricos independientes en el Reino Unido, con más de 10 millones de medidores en total, incluyendo 7,5 millones de medidores inteligentes y 2,5 millones de medidores tradicionales en todo el país. Ha proporcionado más de 1.500 millones de libras de financiación para ayudar con el despliegue de medidores inteligentes en Gran Bretaña.
A finales de 2024, se habían instalado 38 millones de medidores inteligentes en hogares y pequeñas empresas británicas con el apoyo del Programa de Implementación de Medidores Inteligentes, liderado por el regulador energético del Reino Unido (Ofgem).
IBERDROLA TRABAJA EN CONTENER SU ‘DEBE’
En el mismo comunicado, Iberdrola anunció que la operación se enmarca en su estrategia de rotación de activos no estratégicos, que ya supera los 10.000 millones de euros en operaciones de alianzas y desinversiones. De hecho, el acuerdo con McQuarie es la segunda mayor desinversión en la historia de Iberdrola, después de la venta de los ciclos combinados en México el año pasado.
Esta política es necesaria para poner coto a la abrumadora masa de endeudamiento que plaga las cuentas de la energética, y que, tal y como temían los expertos, engordó aún más durante el primer trimestre de 2025.
En el primer trimestre de 2025, la deuda neta de Iberdrola pasó de aproximadamente 51.700 millones de euros a 55.700, un aumento de casi el 8%. Esa cifra supera al conjunto de la economía de Jordania
Entre enero y marzo, la deuda neta ajustada de Iberdrola pasó de aproximadamente 51.700 millones de euros a 55.700, un aumento de casi el 8%. Para poner esta cifra en perspectiva, baste decir que supera ampliamente al conjunto de la economía de un país como Jordania, cuyo Producto Interior Bruto (PIB) de 2023 fue de 50.970 millones de dólares (46.921 millones de euros).
Bien es cierto que el ‘debe’ de Iberdrola va en consonancia con su tamaño, relevancia y, sobre todo, ambición. La energética es, junto a Telefónica e Inditex, una de las tres únicas cotizadas del Ibex 35 que alcanzan un Ebitda superior a los 10.000 millones de euros.
En 2024, la compañía del Ibex con mayor Ebitda fue Iberdrola. Durante el pasado ejercicio, la eléctrica presidida por Ignacio Sánchez Galán alcanzó un Ebitda de 16.848 millones de euros, un 16,9% más que durante el ejercicio anterior.
ASIA, DESTINO DE VENTAS
Recientemente, la eléctrica presidida por Ignacio Sánchez Galán ha cerrado dos operaciones de ventas con sendos partners asiáticos para profundizar en su programa de desinversiones.
Por un lado, alcanzó con la japonesa Kansai, segunda eléctrica de Japón y una de las mayores de Asia, un acuerdo para el traspaso del 49% del parque eólico marino alemán de Windanker. Además, Iberdrola anunció que Neoenergía, su filial en Brasil, venderá el 50% de su participación en la red eléctrica de transporte Itabapoana al fondo soberano de Singapur, Government of Singapore Investment Corporation (GIC).