El ‘Gran Apagón’ aún no tiene respuestas, pero sí precio. A los varios centenares de millones en costes directos por los daños producidos hay que sumar el gasto adicional por las medidas extraordinarias acometidas para garantizar la estabilidad del sistema y, más a largo plazo, la cara expansión de las infraestructuras eléctricas, necesaria para que semejante desastre no se vuelva a repetir.
LOS DAÑOS DIRECTOS DEL APAGÓN: UN 34% MENOS DE CONSUMO
Una vez declarado el apagón general, la situación en la calle no tardó en hacerse insostenible: atascos interminables, personas atrapadas en ascensores, productos perecederos estropeándose, cirugías suspendidas, consultas médicas aplazadas… Las comunidades de Andalucia, Extremadura y Madrid llegaron a solicitar la activación del nivel máximo de emergencia, por lo que la gestión pasó al Gobierno central.
CAIXABANK RESEARCH ESTIMA EL IMPACTO ECONÓMICO DIRECTO DEL APAGÓN EN 400 MILLONES DE EUROS, EL EQUIVALENTE AL 0,02% DEL PIB
La primera estimación cuantitativa del impacto económico del corte fue realizada por el servicio de estudios de Caixabank Research, que estimó en alrededor de 400 millones de euros el coste directo para la economía española; o lo que es lo mismo, el 0,02% del Producto Interior Bruto (PIB).
Para realizar el estudio, Caixabank Research utilizó datos de pagos y reintegros, agregados y anonimizados, realizados con tarjetas emitidas por CaixaBank. Concretamente, se manejó la información de pagos presenciales con tarjetas, reintegros en cajeros y consumo online.
En base a las estadísticas recabadas, la entidad concluyó que el 28 de abril el gasto en consumo del conjunto de los hogares españoles cayó un 34% a causa del apagón.
ENCARECIMIENTO DE LA FACTURA DE LA LUZ
Según ha comprobado El Periódico de la Energía sobre datos extraídos de la web de Red Eléctrica de España (REE), los costes de los servicios de ajuste del sistema eléctrico español alcanzaron niveles sin precedentes tras el apagón, impulsando el precio final del suministro.
REE, gestora del sistema eléctrico de nuestro país, se vio obligada a tomar medidas de excepción para estabilizar el sistema, como las llamadas restricciones técnicas al Programa Base de Funcionamiento, un tipo de actuación reservado para situaciones críticas que supone un fuerte coste económico.
EL GOBIERNO ASUME QUE LAS MEDIDAS DE EXCEPCIÓN QUE SE ESTÁN LLEVANDO A CABO PARA ESTABILIZAR EL SUMINISTRO TENDRÁN UN COSTE QUE SE TRASLADARÁ A LA FACTURA
Durante la semana que siguió al apagón, la primera de mayo, la media diaria alcanzó los 30 euros por megavatio hora (€ MW/h), una cantidad un 1.500% mayor que los 2 euros MW/h de 2019.
El Gobierno ya ha admitido que las operaciones extraordinarias que REE aún sigue llevando a cabo para apuntalar la robustez del entramado eléctrico español supondrán un coste extra en la factura, especialmente porque desde el suceso el gas y las hidroeléctricas han ganado protagonismo en un mix dominado por la solar y la eólica.
No obstante, el Ejecutivo asegura que el sobrecoste será «mínimo», aspecto confirmado por el portavoz de Facua, Rubén Sánchez: «En la factura, entendemos que el impacto será casi inapreciable», señala Sánchez en declaraciones a MERCA2.
HORA DE METER DINERO EN LA RED ELÉCTRICA
El bautizado como ‘Gran Apagón’ se ha convertido en toda una trinchera política llena de acusaciones cruzadas y aprovechamiento ideológico. Sin embargo, hay un juicio que concilia la práctica totalidad de las voces autorizadas de la industria: la imperiosa necesidad de aumentar la inversión en redes eléctricas. Y mucho.
José Bogas, CEO de Endesa, Ignacio Sánchez Galán, presidente de Iberdrola, y Francisco Reynés, presidente de Naturgy, llevan años enarbolando esta reivindicación, a la que se han sumado casi todas las empresas e instituciones del sector energético, mayores o menores. El reclamo solo empezó a dar frutos el pasado junio, cuando el Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico (MITECO) abrió una consulta pública para aumentar el límite de inversión en redes eléctricas.
EL MITECO TIENE PREVISTO SUPERAR LOS 50.000 MILLONES DE INVERSIÓN EN REDES ELÉCTRICAS PARA 2030, PARA LO QUE ES NECESARIO SUBIR EL TOPE DE FINANCIACIÓN HASTA EL 17% DEL PIB
Sin conocerse aún los motivos concretos del apagón (y ya se ha deslizado que tal vez no lleguemos a conocerlos nunca), es evidente que el caos desatado el 28 de abril ha evidenciado que la infraestructura eléctrica española necesita refuerzos urgentes.
El MITECO se ha marcado como objetivo que la financiación destinada a este fin de aquí a 2030 alcance los 52.360 millones de euros. Para llegar a esa cifra, se ha tenido que multiplicar casi por tres (un 80% más) la cantidad máxima de inversión en redes establecida en la anterior normativa, subiendo el tope hasta el 17% del PIB.
Según el informe Grids for Speed, de la consultora internacional Ernst & Young (EY), España necesita unas inversiones anuales de 4.300 millones de euros, frente a los 2.000 ‘kilos’ que se inyectan actualmente.