domingo, 11 mayo 2025

Ouigo, Iryo y Renfe obligados a devolver miles de billetes de dos crisis seguidas

Las tres compañías que compiten por los viajeros de la alta velocidad en España, Ouigo, Iryo y Renfe han tenido un par de semanas complicadas. Por un lado, fueron afectadas más que otros sectores por el apagón del pasado lunes 28 de abril, ya que no pudieron volver a la normalidad hasta que no pasaron casi 48 horas desde el cero inicial, mientras que se recuperaba la tensión necesaria para que pudiesen operar en todo el país. Tan solo una semana después, el robo de cables en varios puntos en la conexión de Madrid y Andalucía interrumpió el servicio en una de las líneas clave del país, justo en la semana de la Fería de Sevilla. 

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Es una situación que pone a las tres empresas en la complicada realidad de responder quejas por retrasos y solicitudes de devolución del costo de los billetes de miles de viajeros, aunque no revelan el número exacto de momento. Es además un recordatorio de lo delicada que es su situación y que en los tres casos su funcionamiento, y, por tanto, sus ingresos, dependen del funcionamiento de unas vías en manos de ADIF, y de un muy criticado Ministerio de Transporte y Movilidad que lidera el controvertido Óscar Puente. 

Lo cierto es que es una serie de problemas que ocurre justo mientras ADIF se prepara para la segunda etapa de la liberalización del servicio, y es un aviso de los conocidos problemas del sistema de alta velocidad español para las empresas que puedan mostrar interés. Es bueno mencionar que, cuando no tiene problemas, el sistema de alta velocidad español es uno de los más atractivos del mundo y en los últimos años, de la mano de la llegada de Ouigo e Iryo, no ha hecho más que aumentar el número de usuarios. El problema es, simplemente, que cuando hay un fallo es uno masivo.

A esto se suma que, en los últimos años, los sistemas no han podido terminar de instalarse del todo como se esperan. Tanto Ouigo como Iryo han tardado más de lo esperado en completar la instalación de todo el servicio que esperaban. Es que la suma de pequeñas crisis, los procesos para homologar los vehículos en algunas de las líneas más importantes de España y, por supuesto, el confinamiento pandémico que retrasó los procesos de liberalización y además canceló todos lo viajes, han generado un proceso más engorroso del esperado, aunque uno igual de lucrativo.

UN RECORDATORIO DE LOS RETOS DE ADIF Y LA ALTA VELOCIDAD

Al mismo tiempo, los problemas que ha enfrentado todo el servicio son también un recordatorio de lo complicado que es el funcionamiento de este tipo de líneas. Son servicios realmente delicados, que pueden verse interrumpidos del todo por un simple corte de cables, además de ser todavía más dependientes del servicio eléctrico que los aviones. En esa realidad es clave que se presenten garantías a las empresas que quieran operar en el sistema de cara al futuro inmediato, sobre todo si se mantiene la apuesta de que los trenes de alta velocidad sean más populares que los aviones y los vehículos particulares de aquí a 2030. 

AVE de Renfe. Fuente: Agencias
AVE de Renfe. Fuente: Agencias

De todos modos, aunque las incidencias del sistema de alta velocidad y de otros sistemas de trenes españoles como los de Cercanías o el de Rodalies en Cataluña son constantes, las caídas de todo el sistema, o incluso de una ruta completa, no son tan comunes. Los retrasos y los trenes detenidos en la vía, sin embargo, sí son una parte permanente del panorama de la alta velocidad y los otros servicios de trenes nacionales, un detalle a tener en cuenta en el futuro inmediato.

OUIGO E IRYO YA PIENSAN EN LA SEGUNDA ETAPA DE LA LIBERALIZACIÓN

Mientras tanto, tanto Ouigo como Iryo siguen en su proceso para sumarse a la segunda etapa de la liberalización de la alta velocidad española. Incluso en esa realidad es posible que sean otras empresas las que operen las próximas rutas, se suma, además, la posibilidad de que estas empresas busquen otros fabricantes como aliados para operar estas rutas está allí, sobre todo frente a la tardanza de las entregas de Talgo y la novedad de la alta velocidad de Iryo. 


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