Comprar un coche nuevo hoy en día no es precisamente una decisión fácil. Y menos si hablamos de un coche eléctrico. Lo que parecía ser el futuro prometedor de la automoción ha tropezado con una realidad mucho más compleja: precios elevados, escasez de puntos de carga y una demanda que simplemente no despega. Pero donde unos ven problemas, otros ven oportunidades. Y ahí es donde entra el truco del que ha hablado la OCU.
Aunque hace unos años se auguraba una explosión de ventas de vehículos eléctricos, lo cierto es que las cifras actuales distan mucho de ese escenario ideal. En España, por ejemplo, ni siquiera alcanzan el 1 % del parque móvil. Y eso ha traído consecuencias inesperadas, entre ellas una caída vertiginosa en el valor de los coches eléctricos de segunda mano.
7Lo que nadie te cuenta del renting

Según la OCU Muchos de los coches eléctricos de segunda mano que hoy se encuentran en el mercado provienen de flotas de renting o alquiler. Eso, lejos de ser un inconveniente, puede ser una garantía de buen estado, ya que suelen pasar revisiones periódicas y contar con historiales de mantenimiento detallados.
De hecho, muchas de esas unidades se venden con apenas tres años de uso y en condiciones casi impecables. Y lo más importante: a precios muy por debajo de los que se encuentran en concesionarios tradicionales.