sábado, 10 mayo 2025

Bankinter destaca de Repsol su enfoque en el accionista, pese a los malos resultados y las peores perspectivas

Los resultados trimestrales de Repsol han sido, objetivamente hablando y sin considerar circunstancias externas, mediocres. Sin embargo, y a pesar de los vientos huracanados y de las inundaciones en la bodega, los inversores tienen garantizado el camarote, algo que en Bankinter aprecian, aunque su recomendación sobre las acciones de la petrolera sea Vender.

Publicidad

Pilar Aranda, analista del banco, parte de las causas del desplome en las cuentas de Repsol: la caída del precio del petróleo y menores márgenes de refino, que han dado lugar a unos resultados «débiles y peores que lo esperado».

«A pesar del contexto, la compañía confirma su retribución al accionista, con una rentabilidad por dividendo estimada del 8,9% para 2025» -señala- «En nuestra opinión, Repsol cuenta con un balance saneado, cotiza a múltiplos atractivos y ofrece una elevada remuneración al accionista, con una rentabilidad por dividendo estimada para 2025 de aproximadamente 8,9%».

REPSOL, VÍCTIMA DE LA ACTUALIDAD

Repsol ha confirmado que repartirá en 2025 un dividendo de 0,975 euros por acción, lo que representa un incremento del 8,3% respecto a 2024 y una rentabilidad por dividendo aproximada del 8,9%. «Consideramos que existe una alta probabilidad de que la compañía cumpla con este objetivo, dado su balance saneado», estima Aranda.

No obstante, el buen trato al inversor, por exquisito que sea, puede cambiar la realidad geopolítica que sacude al mercado: «Reiteramos nuestra recomendación de vender debido a la tendencia bajista del precio del petróleo», sentencia Aranda, quien por otro lado recuerda que la fuerte exposición de Repsol a Venezuela «supone un riesgo significativo».

«Situamos el precio objetivo en 11,8 euros por acción, frente a los 13,3 euros por acción anteriores, lo que representa un potencial de revalorización del 6,8%», expone.

El menor atractivo del sector del petróleo, cuyos precios están envueltos en una dinámica bajista, es la razón principal por la que bankinter le estampa a Repsol la dura etiqueta de ‘vender’

Bankinter estima que el precio del crudo descenderá en los próximos años debido a la desaceleración económica, en gran medida provocada por la guerra arancelaria, que impacta tanto en el crecimiento económico como en la inflación. «Sin embargo, otros factores también influyen, como el auge de las energías alternativas y una mayor eficiencia energética global» -matiza el informe- «Además, nos encontramos en un contexto de sobreproducción mundial, que se verá intensificado por los planes de Estados Unidos y la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) de incrementar la producción».

El menor atractivo del sector es, por tanto, la razón principal por la que el banco le estampa a Repsol la dura etiqueta de Vender.

EL PRECIO DEL CRUDO ARRASTRA LAS CUENTAS DE REPSOL

En el primer trimestre de 2025, Repsol registró importantes retrocesos en las métricas más relevantes, afectadas por la inestabilidad del mercado de combustibles fósiles y el descenso en picado del negocio químico.

El resultado bruto de explotación (Ebitda) de la petrolera se quedó en 14.408 millones de euros, un descenso del 5,1% interanual, frente a 11.793 millones de euros estimados. Al beneficio neto le fue aún peor: 366 millones de euros frente a los 969 millones de euros del primer trimestre de 2024 y los 616,4 millones de euros que, según las estimaciones, debería haber reportado entre enero y marzo del presente ejercicio.

El beneficio por acción se quedó en 0,30 euros (0,79 euros en el primer trimestre de 2024), frente a 0,532 euros estimados; mientras que en el área de producción se registraron 540.000 barriles diarios, igual que lo publicado preliminarmente el 7 de abril, lo que también supone un desplome en comparación con los 590.000 barriles diarios en el primer trimestre de 2024.


Publicidad