El universo de Sueños de Libertad se alteran con un puñado de revelaciones que cambian las reglas del juego en su próximo capítulo. Aquello que fue el arranque de una lucha por el dominio de la fábrica de perfumes, ha derivado en un enfrentamiento por el alma de la familia De la Reina. Ángel Ruiz pone en claro la verdad sobre María y Don Pedro, e incluso, la propia Fina lanza un ultimátum a Marta, además de recriminarle anteponer el negocio a la relación.
Pero no son los únicos que deben enfrentarse a decisiones definitivas: Digna decide que es el momento de celebrar su boda hasta que llega la tragedia y Luis queda atónito cuando ve caer por completo su sueño profesional. En este capítulo de Sueños de Libertad, las alianzas caen, los secretos afloran y nadie sale indemne.
2AMOR, NEGOCIOS Y UNA GUERRA

En Sueños de Libertad, Marta sufre la tensión entre su corazón y la responsabilidad que siente hacia lo que espera de ella. Fina no le lanza solamente la advertencia de un ultimátum, sino que también la acusa de anteponer lo que es el trabajo del príncipe a la relación que existe entre ellas: «¿Cuánto te falta para sacrificar por los De la Reina?, le dice a la cara Fina, llena de lágrimas en los ojos y la frustración contenida.
La que no se queda sola en la angustia es Marta. Luis, por su parte, acaba de enterarse de que Galerías Miranda ha dejado de lado su perfume, poniendo en peligro un contrato millonario, lo que le hace enojarse hasta tratar de pegar a su prima, mientras que el primo por primera vez se atreve a defender a Marta.
Fina, sin embargo, sabe que hay algo más. Se lo dice a Luis para intentar que, al menos, el primo entienda que el problema no es Marta, sino unas fuerzas ocultas que quieren acabar con la familia. «Floral no es solo una competidora, es además un rival que juega con las armas más sucias», le dice justo antes de que el detective irrumpa en la escena, poniendo a Fina en una situación comprometida.
¿Está la protagonista de la historia a punto de dar un paso donde se puede poner en juego un secreto que cambiaría la situación de forma radical? Pero a su vez Marta y Ángel Ruiz han acordado un punto de vista sobre lo que va a suceder en la fábrica; decisión que la podría alejar definitivamente de Fina.
Sin embargo, nadie en este juego llega a salir indemne. Marta se da cuenta, y acepta que por primera vez le va a tomar decisiones, que antes sería la última de las cosas que gustaría de hacer. «Si tengo que elegir entre la fábrica y ser feliz, ¿qué va a quedar de mí?», piensa para sí misma sin atreverse a reproducirlas en voz alta y observando el anillo que le regaló Fina. La respuesta tampoco será fácil de encontrar. Y mientras tanto, el tiempo se estrecha.