Ayer la herramienta fedwatch de CME Group apuntaba a una probabilidad del 96,9% de que la Reserva Federal mantendría los tipos inalterados en el actual 4,25/4,50%, lo que supone que apenas hay una probabilidad del 3,1% de una bajada de 25 puntos porcentuales.
Los economistas consultados por Merca2 apuntan en esa dirección de consenso, pero más allá de la decisión, las previsiones de todos ellos difieren. Algunos hablan de que se descuentan hasta cuatro bajadas a lo largo de 2025, tres en los próximos doce meses o nada, hasta 2026.
Erik Weisman, economista jefe de MFS Investment Management, señala: “es casi seguro que el presidente Powell exprese una actitud de “esperar y observar” en la reunión de la Fed de esta semana. El caos de la política arancelaria de EE. UU. hace que el panorama macroeconómico futuro sea especialmente difícil de descifrar. Con la probabilidad de que los precios de los bienes suban considerablemente y un mercado laboral que podría debilitarse, el doble mandato de la Fed solo apunta a la ambigüedad.”
“Si a la confusión arancelaria se le suman los próximos e inciertos cambios en la política fiscal, regulatoria, migratoria y los efectos de DOGE, sería difícil culpar a la Fed por querer desesperadamente más tiempo y claridad antes de señalar cualquier cambio significativo en su postura de política monetaria. En otras palabras, en ausencia de un deterioro económico real, es probable que la Fed llegue tarde con los recortes si estos fueran necesarios.”
“Los datos relativamente sólidos del mercado laboral del viernes, junto con solicitudes de subsidio de desempleo estables, una generación de ingresos adecuada y un consumidor resiliente, sugieren que no hay urgencia por recortar los tipos. Sin embargo, una lectura algo débil de la inflación del PCE, junto con una inflación salarial modesta, daría a la Fed cierta comodidad para relajar las condiciones monetarias si y cuando sea necesario.”
El dólar estadounidense sigue débil y se mantendrá así los próximos meses
Por su parte, Daniel Loughney, responsable de Renta Fija para MIFL (Mediolaum International Funds), apunta:“aunque Powell probablemente adopte un tono más restrictivo, el gráfico de puntos (DOT plot) podría reflejar un giro más moderado, ya que algunos miembros como Waller y Hammack han advertido sobre el posible impacto negativo de la incertidumbre en torno a los aranceles sobre la actividad económica y la inflación. De hecho, con la confianza del consumidor debilitándose y señales tempranas que apuntan a una desaceleración de la actividad económica, mientras que la inflación medida por el PCE ha seguido descendiendo, el mercado ha comenzado a descontar un mayor nivel de flexibilización, con más de tres recortes de tipos ya descontados para finales de 2025.”

Una tercera opinión es la de Michael Krautzberger, CIO Global de Renta Fija de Allianz Global Investors, para quien la política comercial del gobierno de Trump ha puesto a la Fed en una situación muy complicada, generando una gran incertidumbre en los mercados financieros, en las empresas y en los hogares.
Jerome Powell, presidente de la Fed, ha dejado claro en sus últimas declaraciones que, de momento, mantendrán una actitud prudente. Quieren observar cómo afectan los aranceles a la economía antes de tomar nuevas medidas, aunque el presidente Trump insiste en que se bajen los tipos en el corto plazo.
Los mercados tampoco esperan recortes en mayo, y nosotros compartimos esa visión. Aun así, si la actual política arancelaria no cambia en los próximos meses, podría forzar a la Fed a intervenir si la economía se deteriora con rapidez.
De hecho, los mercados ya están anticipando hasta cuatro recortes de tipos de aquí a final de año. Si aumentan los riesgos de recesión o se intensifica el conflicto comercial a nivel global, los mercados podrían incluso adelantar esas expectativas.
los mercados ya están anticipando hasta cuatro recortes de tipos de aquí a final de año
La Fed, sin prisa para actuar
David Page, director de Investigación Macroeconómica de AXA Investment Managers, explica que “es probable que en la reunión de esta semana la Fed mantenga su perspectiva de no tener prisa por actuar”, aunque, tal y como indica el economista, “para la Fed, el riesgo no es que el menor crecimiento del empleo suavice directamente la tasa de inflación subyacente, sino que empuje a la economía a una desaceleración más brusca, desencadenando la recesión”.
En este entorno, Page señala que, “seguimos esperando pruebas suficientes de deterioro económico para que la Fed emprenda una relajación prudente en junio, aunque han aumentado los riesgos de que esto se retrase hasta julio”, y comenta: “Desde AXA IM seguimos previendo tres recortes este año, hasta el 3,75%, y dos a mediados de 2026, hasta el 3,25%”.

Tiffany Wilding, economista de Pimco, recalca que “es poco probable que los consumidores noten el impacto del aumento de los precios hasta mayo o más adelante, debido a la acumulación de existencias antes de la subida de los aranceles. Por lo tanto, cualquier impacto de la contracción de los ingresos reales tampoco debería notarse hasta mayo o más adelante.”
“Como resultado, es posible que los mercados laborales no empiecen a debilitarse hasta mediados o finales del verano, lo que significa que la Fed no dispondrá de datos concretos que muestren un debilitamiento de la situación hasta julio o, lo que es más probable en nuestra opinión, hasta la reunión del FOMC de septiembre. Por supuesto, una moderación negociada de los aranceles podría mejorar estas perspectivas, pero los aranceles de aproximadamente el 145% sobre los productos chinos están afectando a los consumidores de productos chinos ahora mismo, después de que el Gobierno estadounidense haya eliminado la llamada “exención de mínimos”.
Creemos que los últimos datos de empleo conocido en EE.UU. constriñen a la Fed y no esperamos que los responsables políticos recorten los tipos de interés hasta finales de este año, una vez que los datos hayan mostrado una desaceleración o contracción concreta del mercado laboral. Una vez que la Fed de el paso, esperamos que el banco central continúe bajando los tipos en 2026”.
esperamos que el banco central continúe bajando los tipos en 2026
Por último, Christian Scherrmann, Economista jefe de DWS para Estados Unidos, apunta que la Reserva Federal se encuentra entre la espada y la pared. Por un lado, la inflación fue más baja de lo esperado, lo que probablemente sea una reminiscencia del pasado. Por otro lado, las expectativas de inflación están aumentando, a medida que la gente anticipa el probable impacto de los aranceles. Además, importantes parámetros, como el estado final de los aranceles o lo que cabe esperar de la futura política fiscal, siguen siendo inciertos.
En consecuencia, no esperamos un cambio significativo de la política monetaria en la reunión del FOMC. Sin embargo, es posible que los banqueros centrales quieran dar una señal de menor confianza en el impulso económico. Es probable que ajusten el comunicado de prensa para señalar un crecimiento más “moderado”, sin dejar de insistir en la “solidez” del mercado laboral. En conjunto, creemos que optarán por un tono ligeramente más agresivo, pero más en la dirección de una pausa prolongada que de una posible subida. A medio plazo, la atención se centrará probablemente en la inflación y en si los aranceles tienen efectos secundarios más allá de un simple cambio en el nivel de precios.
Esperamos que la Fed se mantenga al margen, al menos hasta que una ralentización de la actividad económica y el consiguiente debilitamiento del mercado laboral permitan albergar expectativas desinflacionistas. Este podría ser el caso a finales de año, por lo que seguimos esperando que la Fed recorte los tipos hasta tres veces en los próximos doce meses.
seguimos esperando que la Fed recorte los tipos hasta tres veces en los próximos doce meses
Como conclusión, François Rimeu, estratega senior de Crédit Mutuel AM, afirma que “al igual que los mercados financieros, prevemos que la Fed mantendrá el actual statu quo de su política monetaria en su reunión de esta semana, en respuesta a las incertidumbres derivadas del proteccionismo y la guerra comercial.”
“Esperamos que Powell, reitere que la política monetaria de EE.UU. está preparada para adaptarse a la evolución de los indicadores macroeconómicos. Esta postura prudente permite al FOMC esperar a tener mayor claridad sobre las implicaciones de las nuevas políticas de Donald Trump, especialmente en materia comercial, fiscal, regulatoria e inmigratoria. Powell insistirá en que la Fed no tiene prisa por recortar los tipos, salvo que se produzca un deterioro inesperado del mercado laboral o una inflación inferior a la prevista.”