lunes, 30 junio 2025

Carmen Borrego hunde a la familia Campos al confesar la verdad sobre Alejandra Rubio

La familia Campos vuelve a estar en el centro de la atención mediática, esta vez por una tensión latente entre Terelu Campos y su hija, Alejandra Rubio. A pesar de que públicamente se esfuerzan por mostrar una imagen de unidad, las recientes declaraciones de ambas en distintos medios y programas televisivos han puesto de manifiesto una diferencia de criterios que no ha pasado desapercibida para los seguidores del clan. Lo que parecía una simple entrevista de Terelu ha desencadenado una oleada de comentarios, matizaciones y aclaraciones que, lejos de calmar el ambiente, han servido para airear aspectos íntimos de su vida familiar. La última en pronunciarse al respecto ha sido Carmen Borrego, hermana de Terelu y tía de Alejandra, quien ha roto su habitual cautela para dar un paso al frente y defender lo que considera una familia «normal», pese a lo que se diga en los platós y revistas.

Publicidad

1
La verdad sobre la familia Campos

Terelu Campos

Todo comenzó cuando Terelu Campos concedió una entrevista a la revista Diez Minutos, en la que hablaba abiertamente de su relación con Mar Flores, ex de su sobrino José María Almoguera, y de otros asuntos personales que afectaban de lleno al entorno de su hija. Aunque sus palabras no iban cargadas de críticas, Alejandra Rubio no tardó en manifestar su disconformidad con esa exposición pública. La joven, también colaboradora televisiva, expresó su malestar durante una emisión de Vamos a ver, donde aseguró que consideraba innecesario hablar de temas tan íntimos. “No hay que dar explicaciones a nadie sobre lo que pasa en nuestra familia”, afirmó con determinación, dejando claro que le costaba entender las motivaciones de su madre para hacer tales confesiones.

A raíz de esta pequeña tormenta, Carmen Borrego ha dado un paso adelante y ha querido zanjar la polémica. Primero lo hizo con palabras conciliadoras, asegurando que no existía ningún conflicto serio entre madre e hija. Sin embargo, en su última intervención en el mismo programa de Telecinco, Carmen ha elevado el tono y ha defendido con firmeza la libertad de su hermana para hablar sobre lo que considere oportuno. Según explicó, tanto Terelu como Alejandra son adultas y capaces de resolver sus diferencias sin necesidad de dramatizar. “Que a Mar no le guste o a Alejandra no le haga gracia no significa que haya un problema entre madre e hija, porque me consta, he hablado con las dos”, subrayó Borrego con contundencia. Su discurso fue una mezcla de sinceridad y deseo de proteger la imagen de su familia, a la que calificó como “completamente normal” pese a las apariencias.

La colaboradora también quiso desmontar lo que considera una narrativa habitual en torno a las Campos: la de que siempre hay conflicto. Asegura que dentro de su familia, como en cualquier otra, existen diferencias, discusiones y momentos de tensión, pero también cariño y respeto. “Nadie va en contra de nadie y nadie intenta ser más que nadie”, insistió Carmen, en una clara alusión a la interpretación que muchos hacen de las disputas mediáticas que rodean a su clan. A pesar de todo, parece que el ruido mediático sigue generando incomodidad, especialmente cuando la opinión pública y los tertulianos convierten estas cuestiones familiares en motivo de análisis y debate.

En medio de esta tormenta, también se ha colado la figura de Mar Flores, sin buscarlo ni quererlo. Fue precisamente la mención de su nombre en la entrevista de Terelu la que desató una cadena de reacciones. Mar, por su parte, ha respondido con un tono medido pero revelador. En sus últimas declaraciones, reconoció sentirse “ridícula” al tener que hablar de temas familiares en los medios, y evitó profundizar en su vínculo actual con Terelu. “No me corresponde opinar”, dijo Carmen Borrego al respecto, eludiendo entrar en un terreno que, según ella, solo puede traer más problemas. Recalcó que no tiene ninguna relación personal con Mar Flores y que, por tanto, prefiere no juzgar sus declaraciones ni sus acciones.

Atrás

Publicidad