Susanna Griso se ha mostrado visiblemente afectada al abrir el programa Espejo Público, interrumpiendo la programación habitual para narrar en primera persona los efectos del histórico apagón que dejó a gran parte de España sin luz durante más de doce horas. Durante la jornada del lunes, España vivió una crisis energética sin precedentes, con gran parte de la población afectada por la falta de electricidad y la desconexión con el resto del mundo. Desde las primeras horas de la mañana, los problemas fueron palpables, y fue a partir del mediodía cuando la situación se agravó. La mayor parte del territorio español no pudo acceder a la luz ni a las comunicaciones, lo que provocó incertidumbre y preocupación entre los ciudadanos.
2Las declaraciones de Susanna Griso

El relato de la presentadora también subrayó cómo el apagón afectó a otras personas en situaciones similares. Mientras que algunos solo tuvieron que caminar unos minutos para llegar a la estación, hubo muchos otros que se quedaron atrapados durante horas dentro de los vagones de tren, esperando a que el servicio se reestableciera para poder regresar a sus hogares. Lo mismo ocurrió con los vehículos particulares y los autobuses, que no pudieron circular debido a los cortes de energía. Griso relató que muchas personas fueron forzadas a pasar horas esperando en estaciones o en paradas de autobuses, viviendo una situación de total desorientación y desesperación.
Aunque la situación comenzaba a estabilizarse, el impacto de lo sucedido era claro. El apagón no solo desveló la fragilidad del sistema eléctrico, sino que también evidenció cómo la vida cotidiana depende cada vez más de la electricidad, y cómo un corte tan masivo puede desbaratar el ritmo de las ciudades y las comunidades. En el caso de Susanna Griso, la experiencia fue una oportunidad para reflexionar sobre las repercusiones de los problemas de suministro, y cómo algo tan esencial como la energía puede afectar la vida diaria de una forma tan inmediata y profunda.