Tras el anuncio de la Comunidad de Madrid de que recurriría la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) donde se aprobaban cerca de 2.500 licencias de VTC para Cabify, el unicornio español ha conseguido un aliado inesperado. Es que el sindicato mayoritario de su filial Vecctor, la Unión General de Trabajadores (UGT), ha salido en defensa de la sentencia original y han pedido que se acate lo más pronto posible para crear más empleo en un sector que sigue pasando por un momento complejo.
«Desde el Sector de Carreteras, Urbanos y Logística de UGT Madrid, queremos expresar nuestro apoyo a la creación de empleo que se puede generar en el Sector de VTC tras el reciente pronunciamiento del TSJM tras conceder 2.500 nuevas licencias», explica el comunicado del sindicato, que también señala que estos nuevos empleos deben cumplir con lo exigido tanto en el convenio colectivo de del sector en la Comunidad como con lo firmado por la organización y Vecctor.
«://www.moncloa.com/politica/instituciones/gobierno/» title=»Gobierno» data-wpil-keyword-link=»linked» data-wpil-monitor-id=»141501″>Gobierno de Ayuso e incluso la de la principal patronal del Sector, Unauto VTC.
Para Cabify es una buena noticia. Tras una reciente reunión del comité de empresa de Vecctor la empresa vuelve a tener una relación tensa con la organización sindical, incluso con la posibilidad de una huelga de sus conductores si no se revisan algunas de las exigencias hechas a los mismos en los últimos meses. Entre ellas la de dejar los coches en bases específicas para ser recogidos por otro conductor, y que pudiesen ser recogidos por otros conductores. Esto dificulta alcanzar algunos de los bonos por facturación de los que los repartidores dependen para sobrevivir.
UGT Y CABIFY FRENTE A LA PATRONAL
Lo cierto es que es extraño ver una situación en la que los sindicatos y la plataforma de transporte se enfrentan frontalmente con la patronal del sector. El motivo es simple, Unauto VTC no representa a plataformas como Uber, Cabify o Bolt, sino a las empresas que realmente son dueñas de los coches y de las licencias con las que estas operan, como pueden ser Vecctor o Auro. Esto hace que estén en un lugar complejo, pues una explosión en las licencias podría complicar el negocio de estas empresas.
A este reto se suma que no se trata solo de 2.500 nuevas licencias, sino además de un precedente que puede terminar por generar más de 9.000 licencias nuevas de VTC en la capital. Es un dato que preocupa en Unauto, como en su momento lo explicó su presidente, Jose Manuel Berzal, a este medio.
«Somos la única patronal del sector en la Comunidad Autónoma de Madrid (CAM,) que en su día hicimos público, y hoy reiteramos que no vamos a apoyar un crecimiento innecesario del sector en beneficio de intereses particulares. Apostamos por un crecimiento sostenible que siempre tenga el objetivo de equilibrar la oferta y la demanda en el contexto del sector de la movilidad, considerando a todos los actores que configuramos el ecosistema del sector», sentenció Berzal en su momento.

Es un sentimiento que se mantiene. En cualquier caso, al menos de momento, estas licencias aún no generan un cambio importante en la ciudad, con Cabify obligada a esperar por el resultado del nuevo recurso de la Comunidad antes de que empiecen a funcionar. En cualquier caso, será una situación que tendrán que enfrentar las diferentes partes del sector cuando llegue el momento.
EL 1 POR 30 YA NO APLICA EN MADRID
En cualquier caso, es importante tener en cuenta que la decisión que tomen los tribunales sobre el nuevo recurso de la Comunidad de Madrid no puede aprobarse, o negarse, por la norma de 1 por 30, que estaba pensada para proteger a los taxistas. Desde el Tribunal de Justicia de la Unión Europea se ha dejado claro que las limitaciones a las VTC, sean de Cabify, Uber o Bolt, no pueden venir por la necesidad de proteger el taxi, aunque se permiten si quieren aplicar controles sobre el tráfico o sobre las emisiones de carbono.
Es un dato que conocen en la CAM, y aunque sí que se han tomado otras medidas alrededor de algunos de los problemas más evidentes de las VTC, en particular de la tarifa dinámica. Sin embargo, la política de la capital ha sido que estas ocupen un espacio dentro del panorama de la movilidad, así que hay algo de sorpresa en la reciente decisión de seguir luchando contra la aprobación de nuevas licencias.