Cuidar el estado de tu vehículo no es solo una cuestión de rendimiento, sino también de seguridad. La DGT ha lanzado una advertencia que afecta a todos los conductores cuyos coches superan los 10.000 kilómetros, ya que a partir de este punto, ciertos elementos mecánicos comienzan a desgastarse de forma notable. Entre ellos, la batería es uno de los componentes más sensibles, y su fallo puede provocar averías graves e incluso situaciones de riesgo en la carretera.
Ignorar las revisiones periódicas puede derivar en problemas inesperados, como dificultades para arrancar o fallos en los sistemas eléctricos. La DGT enfatiza que un mantenimiento adecuado no solo alarga la vida útil del coche, sino que también evita accidentes y costosas reparaciones.
8El papel de la DGT en la seguridad vial

Más allá del mantenimiento del vehículo, la DGT juega un papel clave en la seguridad vial a través de campañas de concienciación y medidas de control. Uno de sus principales objetivos es reducir el número de averías que pueden provocar accidentes, asegurándose de que todos los conductores mantienen sus coches en condiciones óptimas.
Las revisiones mecánicas periódicas no solo son una recomendación, sino una responsabilidad de cada conductor. Ignorar el estado del vehículo puede poner en riesgo no solo la seguridad propia, sino también la de otros usuarios de la carretera. La DGT insiste en que un coche bien mantenido es un coche más seguro.