Tras un avance vertiginoso durante el pasado año, 2025 será testigo de la consolidación de la inteligencia artificial (IA) como un elemento clave en las estrategias empresariales a nivel global, España incluida, por supuesto.
Así lo reflejan los resultados del último informe “AI Radar” publicado por Boston Consulting Group (BCG), en el que según más de 1.800 directivos de alto nivel encuestados, un 81% de las compañías españolas sitúa la IA y la IA generativa entre sus principales prioridades estratégicas para 2025.
Un porcentaje que coloca a nuestro país por encima de la media mundial (75%) y solo ligeramente por detrás de India (82%), que lidera esta clasificación.
Se trata de una realidad que para los profesionales marcará definitivamente la necesidad de sumar conocimientos en IA en el CV, mientras que las empresas deberán apuntalar la transformación cultural, la mejora de competencias y la implementación de marcos regulatorios robustos.
¿Oportunidad o amenaza para el empleo en 2025?
El impacto de estas tecnologías en el empleo ha estado en el ojo del huracán desde su aparición con opiniones, análisis y proyecciones que apuntan a escenarios diversos.
En este sentido, la investigación de BCG arroja que el 68% de los ejecutivos prevé mantener el número de trabajadores en sus plantillas y poner el foco en la mejora de habilidades en IA para satisfacer las demandas tecnológicas.
En cuanto a la expectativa de empleabilidad, solo un 10% de los ejecutivos en España estima que la IA generará nuevos puestos de trabajo, mientras que un 8% prevé que la automatización conlleve una reducción.
Estas son cifras que reflejan un panorama equilibrado en comparación con otros mercados.
Por otro lado, el 29% de las empresas españolas reporta que esta tecnología genera un valor significativo para sus operaciones. Este dato sitúa a España en el segundo lugar global, solo detrás de Singapur (37%).
A nivel global, una de cada tres grandes empresas planea invertir más de 25 millones de dólares en IA este año, con un enfoque centrado en obtener resultados concretos.
De hecho, el estudio refleja que las compañías líderes destinan más del 80% de sus inversiones en IA a iniciativas transformadoras, mientras que otras empresas concentran el 56% de su presupuesto en mejorar la productividad.
Medición, falta de habilidades y privacidad de datos, entre los retos empresariales
A pesar del entusiasmo por la IA, los retos se mantienen de cara a este 2025.
Por ejemplo: el 60% de las empresas no define ni mide indicadores clave de rendimiento (KPI) financieros relacionados con la creación de valor de esta tecnología.
Además, todavía hay importantes barreras en la falta de habilidades en las plantillas y la resistencia al cambio cultural.
En este contexto, Sylvain Duranton, líder global de BCG X, recordó que el éxito en la implementación de la IA requiere un enfoque disciplinado:
“Los líderes exitosos dedican el 70% de sus esfuerzos a transformar personas, procesos y cultura; el 20% a datos y tecnología; y solo el 10% a algoritmos”, dijo.
Por otro lado, la seguridad y privacidad de los datos se mantienen como las principales preocupacionespara el 66% de los directivos, seguidas de la falta de comprensión en las decisiones de la IA (48%) y los desafíos regulatorios (44%).
Compromiso con el desarrollo de la IA
Pero, la inteligencia artificial no solo se posiciona como prioridad estratégica para las empresas españolas, sino que también marca un hito en el desarrollo tecnológico del país con la creación de una fábrica de IA en Barcelona.
Este proyecto, aprobado por la Comisión Europea, forma parte de una red de siete fábricas de IA distribuidas en el continente que tienen por objetivo democratizar el acceso a la innovación y reforzar el liderazgo europeo en esta tecnología.
La primera fábrica de IA en España, liderada por el Barcelona Supercomputing Center-Centro Nacional de Supercomputación (BSC-CNS), contará con una inversión total de 174 millones de euros, combinando fondos nacionales y europeos.
De esta cantidad, 61,76 millones de euros serán aportados por el Gobierno de España, mientras que la Generalitat de Catalunya destinará otros 14 millones de euros.
La financiación europea, canalizada a través de la Empresa Común de Informática de Alto Rendimiento Europea (Euro HPC), sumará 98,33 millones de euros al proyecto.
Según fuentes gubernamentales, la iniciativa no solo busca potenciar la investigación, sino también facilitar que empresas, pymes y startups accedan a los recursos de supercomputación necesarios para desarrollar proyectos innovadores en IA.
A este respecto, el ministro para la Transformación Digital, Óscar López, recalcó que el proyecto “representa un paso crucial para que España se sitúe a la vanguardia de la innovación tecnológica, generando un ecosistema de startups y empresas que impulsen el desarrollo de la IA”.
Barcelona, uno de los núcleos de IA en Europa
La capital catalana compartirá protagonismo con ciudades como Bolonia, Kajaani y Stuttgart, que también albergarán fábricas de IA.
Este esfuerzo conjunto forma parte de una inversión europea de 1.500 millones de euros, destinada a crear un entorno dinámico e interconectado para el desarrollo de la inteligencia artificial.
El director del BSC, Mateo Valero, subraya que “el objetivo no es solo generar tecnología punta, sino hacerla accesible para las pequeñas empresas a través de la Red Española de Supercomputación, creando una IA que impacte positivamente en toda la sociedad”.