La Navidad es una época llena de celebraciones, reuniones familiares y, sobre todo, comidas memorables. Sin embargo, organizar un menú de Navidad que sea especial sin desbordar el presupuesto puede ser un auténtico desafío. La buena noticia es que existen formas de equilibrar calidad, sabor y economía, logrando que tus invitados disfruten de una velada inolvidable sin que el bolsillo lo resienta. Planificación, creatividad y un enfoque práctico son las claves para lograrlo.
7Postres económicos pero deliciosos

Los postres son una parte esencial del menú de Navidad, y afortunadamente, existen muchas opciones económicas que pueden deleitar a tus invitados. Preparar dulces caseros como turrones, galletas o flanes no solo es más barato que comprar productos ya elaborados, sino que también permite personalizar los sabores según las preferencias de tus comensales.
Otra opción interesante es aprovechar frutas de temporada para hacer postres ligeros y refrescantes. Por ejemplo, una macedonia con un toque de licor o un crumble de manzana pueden ser el broche perfecto para una cena navideña sin necesidad de gastar en productos más caros en el menú de Navidad.