Bodegas Faustino, una de las marcas de vino más renombradas a nivel mundial, ha dado un paso adelante en su trayectoria con la inauguración de su nuevo edificio diseñado por el arquitecto Norman Foster. Este proyecto, denominado ‘Legado Bodegas Faustino’, se presenta como un «proyecto enoturístico Planeta 1.0» que busca ofrecer a los visitantes una experiencia completa y exclusiva alrededor del mundo del vino, el viñedo, la naturaleza, la arquitectura, la cultura y la sostenibilidad.
La Familia Martínez Zabala, cuarta generación al frente de la compañía, ha presentado este ambicioso proyecto que tiene como objetivo ser un «potente dinamizador» de la marca Faustino, líder mundial en la venta de Gran Reserva de Rioja. Con este nuevo proyecto, la familia espera no solo consolidar aún más la imagen de su marca a nivel internacional, sino también posicionar a Oyón, la localidad alavesa donde se ubica, en el mapa mundial del enoturismo.
Familia, Viñedo, Innovación y Sostenibilidad: Los cuatro pilares del Legado Bodegas Faustino
La Familia Martínez Zabala ha destacado que este proyecto «engrandecerá su legado familiar», ya que Bodegas Faustino es el origen de su tradición en el mundo del vino y está ubicado en Oyón, sus raíces. Estos vínculos familiares y geográficos son fundamentales para la propuesta de este nuevo complejo enoturístico.
Asimismo, el Viñedo desempeña un papel central en este proyecto, ya que se ha buscado una «propuesta única de conexión de todos los espacios con los viñedos». Esta integración del viñedo en la experiencia del visitante es una de las características clave del «proyecto enoturístico Planeta 1.0» que se ha diseñado.
Por otro lado, la Innovación también está presente en este legado de los Martínez Zabala. Desde la arquitectura de Norman Foster, que busca la sostenibilidad y la autosuficiencia energética del edificio, hasta las tecnologías más avanzadas aplicadas en todo el complejo, la innovación es un sello distintivo de este proyecto.
Finalmente, la Sostenibilidad es otro de los pilares fundamentales de ‘Legado Bodegas Faustino’. Según el propio Norman Foster, el edificio es «un edificio Planeta 1.0», cuyas emisiones de carbono pueden ser absorbidas de forma natural por los recursos del planeta, convirtiéndolo en un modelo de sostenibilidad en el sector enoturístico.
Proyección Internacional y Dinamización Local de la Marca Faustino
La Familia Martínez Zabala confía en que este proyecto sea un «potente dinamizador» para la marca Faustino, que ya es líder mundial en la venta de Gran Reserva de Rioja y se encuentra entre las 20 marcas de vino más admiradas a nivel global. Con este nuevo complejo enoturístico, esperan no solo consolidar aún más la imagen de su marca a nivel internacional, sino también posicionar a Oyón «en el mapa mundial» y dinamizar la actividad local con negocios complementarios al enoturismo.
Según el director general de la compañía, Francisco Honrubia, este proyecto demuestra «el valor global de la marca Faustino», que cuenta con colaboradores de más de 45 nacionalidades distintas. Además, el lehendakari, Imanol Pradales, destacó que Bodegas Faustino da «un enorme, nuevo y fantástico paso adelante en una trayectoria» que, sin duda, «será de éxito».
Finalmente, la Familia Martínez Zabala subraya que cada botella de Faustino es «una obra maestra que espera ser descubierta y apreciada por el consumidor cuando está en perfectas condiciones de cata», lo que demuestra el compromiso de la bodega por ofrecer productos de la más alta calidad, consolidando aún más su liderazgo en el sector.