Con el cambio de dirigente en Nestlé, que tiene nuevo CEO, Laurent Freixe, la compañía pretende impulsar el crecimiento en toda la organización, y centrarse en la demanda del consumidor, donde hay que ganar en las categorías. No obstante, impulsar las categorías solo pueden realizarlo a través de la innovación, gracias a un sólido conocimiento del consumidor.
En este contexto, en los dos últimos años, Nestlé ha pasado de centrarse en el crecimiento impulsado por el volumen a centrarse en el crecimiento impulsado por los precios. Siguiendo esta línea, la nueva directora financiera, Anna Manz, confirmó la previsión para el ejercicio fiscal de 2024, pero advirtió que la reducción gradual de los márgenes sería desigual.
Sin ir más lejos, frente a los altos costes tanto del café como del cacao que afectan directamente a la producción de Nestlé, la compañía seguirá reinvirtiendo en el negocio mientras el consumidor se toma su tiempo para poder adaptarse a los cambios de precios que siguen aumentando.
LA REINVERSIÓN Y LOS PRECIOS DEL CACAO
En cuanto al café y al cacao, nos encontramos con dos productos que más han notado la presión inflacionaria. Por otro lado, el café de tipología ‘robusta’ es el que registra la mayoría de los aumentos, lo que está afectando directamente a Nescafé. La compañía está empezando a tomar medidas de precios en este sector.
«Ya estamos poniendo precio a los dulces, ya que hemos corregido las diferencias de precios incorrectas. Los consumidores verán que haremos lo mismo con el café. Para que quede claro, es predominantemente en la tipología ‘robusta’ donde estamos viendo los aumentos, lo que afecta directamente a Nescafé, por su lado Starbucks y Nespresso estaban un poco más sesgados hacia el ‘arábica’», señala la directora financiera de Nestlé, Anna Manz.
DESDE NESTLÉ ESTÁN CORRIGIENDO LOS PUNTOS DE PRECIO Y LUEGO INNOVAN PARA TENER LA ESTRUCTURA DE MARGEN ADECUADA
Sin ir más lejos, en el primer semestre Nestlé consiguió beneficios mientras veía algunos precios de costes de insumos favorables. Pero, mirando hacia el año completo de 2024, esa favorabilidad no continuará tan marcadamente como se ha ido viendo en el primer semestre, ya que cuentan con presión sobre los costes de insumos tanto del café como del cacao, que se reflejarán en el segundo semestre.
En este sentido, el margen de cara al segundo semestre será menor, viendo como las materias primas seguirán subiendo tanto en el café como en el cacao; y por su parte, Nestlé deberá de ir tomando los precios. «El café y el cacao son claramente una fuente de presión al alza, pero tenemos beneficios en otros sectores», certifica la directora financiera de Nestlé.
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EL CAMBIO DE CEO EN NESTLÉ
En este sentido, el cambio de CEO de Nestlé tomó al mercado por sorpresa y generó más preocupación sobre lo que significaba para las operaciones y las perspectivas actuales que sobre si el cambio de CEO era apropiado. Quien sale de Nestlé para dejar su trono libre es Mark Scheineder, y ahora el nuevo director ejecutivo en Laurent Freixe.
«Schneider, tuvo un buen desempeño durante el período de gestión de cartera, ya que los mercados estaban en alza y era astuto en materia financiera. Esto le resultó útil a Nestlé. Sin embargo, esperamos que el nuevo CEO, Laurent Freixe, pueda estar mejor capacitado para impulsar los intangibles dentro de la empresa y gestionar mejor el crecimiento orgánico, aunque muchos se mostrarán escépticos ante un cambio sustancial por parte de un empleado de Nestlé de larga trayectoria», opinan los expertos de Deutsche Bank.
Por otro lado, Nestlé ha ido contando con un ritmo más lento de crecimiento en la productividad en los últimos dos años, coincidiendo a su vez con un menor crecimiento del ratio financiero. Desde 2014, el número de fábricas de Nestlé ha disminuido un 23%, y el número de empleados ha disminuido un 20%.
En cuanto a la competencia, tanto Unilever como Danone tendrán niveles de productividad más altos en los próximos 2-3 años de lo que han tenido históricamente, en gran medida porque a día de hoy están mejor administradas y también porque ya han invertido más en sus negocios. Por su lado, Nestlé ha impulsado una agenda de productividad, y eso le conlleva tener menos capacidad para financiar inversiones a corto plazo.