La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) ha publicado los datos del producto interior bruto (PIB) correspondientes al segundo trimestre de 2024, los cuales reflejan un sostenido ritmo de crecimiento económico a nivel global. Aunque la tasa general de expansión se mantuvo estable en comparación al trimestre anterior, algunas de las principales economías del mundo han experimentado una aceleración en su actividad.
Entre los países miembros del G7, se observa un crecimiento más acelerado durante los meses de abril a junio, registrando una expansión del 0,5%, frente al 0,2% del primer trimestre. Este dinamismo se vio reflejado principalmente en el desempeño de Japón y Estados Unidos, quienes lideraron este repunte.
Liderazgo de Japón y Estados Unidos en el Crecimiento del G7
La economía japonesa experimentó una expansión del 0,8% en el segundo trimestre, tras haber sufrido una contracción del 0,6% en los primeros tres meses del año. Por su parte, Estados Unidos también aceleró su ritmo de crecimiento, registrando un aumento del 0,7%, en comparación al 0,4% del primer trimestre.
Estas cifras contrastan con el discreto desempeño de Alemania, cuya actividad se contrajo levemente (-0,1%) en el segundo trimestre, tras haber crecido un 0,2% en el primero. Asimismo, Italia y el Reino Unido también experimentaron una desaceleración en su crecimiento, pasando del 0,3% y 0,7% en el primer trimestre, al 0,2% y 0,6% respectivamente en el segundo.
España Mantiene su Fortaleza Económica
En el caso de España, el ritmo de crecimiento económico se mantuvo estable en el 0,8% durante el segundo trimestre, tres décimas por encima de la expansión promedio de la OCDE y medio punto porcentual más que la media del crecimiento de la zona euro. Este sólido desempeño económico refleja la fortaleza y resiliencia de la economía española.
Entre las demás economías de la OCDE, más de la mitad registraron un peor desempeño en el segundo trimestre en comparación al primero. Destaca la fuerte desaceleración de Israel, cuyo crecimiento del PIB pasó del 4,1% al 0,3%, así como la contracción experimentada por Chile, que pasó de un crecimiento del 2,1% a una caída del 0,6%.
Por el contrario, los mejores resultados correspondieron a Polonia (1,5%), Costa Rica e Irlanda (1,2% en ambos casos) y Países Bajos (1%), evidenciando la heterogeneidad de los desempeños económicos a nivel internacional.
En resumen, el panorama económico de la OCDE en el segundo trimestre de 2024 se caracteriza por un crecimiento sostenido, impulsado principalmente por las principales economías del G7, mientras que el resto de países han presentado resultados más dispares. No obstante, España se destaca como una de las economías más sólidas, manteniendo un ritmo de expansión superior al promedio de la organización y de la zona euro.