Las espinacas, un vegetal que ha sido parte de la dieta humana durante siglos, ha cobrado un protagonismo especial en el ámbito de la nutrición y la salud. La Fundación Española de Nutrición (FEN) ha destacado recientemente las impresionantes cualidades de este superalimento, señalándolo como un componente esencial en una dieta balanceada.
Además de ser un ingrediente refrescante y delicioso, las espinacas son una fuente rica en nutrientes. Están cargadas de vitaminas A, C y K, así como de minerales como el hierro, calcio y magnesio. Estos nutrientes juegan un papel crucial en el funcionamiento del organismo, desde la mejora del sistema inmunológico hasta el fortalecimiento de los huesos.
LA FEN RECOMIENDA LA ESPINACA POR SUS MÚLTIPLES PROPIEDADES

La FEN recomienda las espinacas no solo por su contenido nutricional, sino también por su bajo aporte calórico. Esto las convierte en un alimento ideal para quienes buscan mantener un peso saludable sin sacrificar la ingesta de vitaminas y minerales. Por ejemplo, una porción de espinacas cocidas (aproximadamente 180 gramos) contiene solo alrededor de 40 calorías, pero proporciona una ingesta significativa de hierro y antioxidantes.
Estos antioxidantes, como la luteína y la zeaxantina, son beneficiosos para la salud ocular, ayudando a prevenir enfermedades como la degeneración macular. Otro aspecto relevante es el alto contenido de fibra en las espinacas, lo que contribuye a una correcta digestión y promueve la salud intestinal.
BENEFICIOS PARA LA SALUD
Los beneficios de las espinacas no se limitan a su perfil nutricional. Estudios han demostrado que la inclusión regular de espinacas en la dieta puede tener un impacto positivo en la salud cardiovascular. Sus propiedades antiinflamatorias, combinadas con la capacidad de mejorar el flujo sanguíneo y reducir los niveles de colesterol, las convierten en aliadas en la lucha contra enfermedades del corazón.
Además, su capacidad para desintoxicar el cuerpo y eliminar toxinas es otra razón por la cual la FEN las recomienda fervientemente. Asimismo, hay evidencia que sugiere que el consumo de espinacas puede mejorar la función cognitiva y la memoria. Esto se atribuye a su rica composición en antioxidantes y compuestos antiinflamatorios, que protegen las neuronas y favorecen el flujo sanguíneo al cerebro.
Por estas razones, incorporar espinacas en la dieta no solo es una elección saludable, sino también una estrategia inteligente para promover el bienestar general. Las espinacas, ese «oro verde» de la nutrición, son más que un mero acompañamiento en las comidas. Con sus impresionantes propiedades saludables y su versatilidad en la cocina, son un elemento clave que la FEN recomienda incluir en nuestra dieta diaria.