La adquisición de la empresa ferroviaria española Talgo por parte del grupo húngaro Magyar Vagon a través de una Oferta Pública de Adquisición (OPA) se enfrenta a importantes obstáculos a nivel gubernamental en España. A pesar de contar con el apoyo de la mayoría de las entidades financieras que respaldan a Talgo, el Instituto de Crédito Oficial (ICO), dependiente del Ministerio de Economía, Comercio y Empresa, aún no ha otorgado la dispensa necesaria para que se materialice el cambio de control.
Según fuentes cercanas a la operación, más de veinte bancos han otorgado sus dispensas al oferente húngaro, aunque la OPA no está condicionada a este requisito. Sin embargo, el ICO, que depende del mismo Ministerio que debe pronunciarse sobre la aprobación o veto de la operación, todavía no ha dado su visto bueno. Los bancos financiadores, como el ICO, estudian detenidamente aspectos como el origen del capital, los últimos beneficiarios, la capacidad financiera del oferente y sus planes para la sociedad.
La Posición del Gobierno Español y la Reacción de los Bancos
El Gobierno español parece tener reservas sobre esta operación, especialmente debido a que el 45% del comprador está controlado por el Estado de Hungría, cuyo Gobierno, encabezado por Viktor Orbán, mantiene una confrontación con la Unión Europea. Además, el Ejecutivo relaciona esta adquisición con la extrema derecha.
Sin embargo, las fuentes cercanas a la operación aseguran que el apoyo de los bancos eliminaría cualquier sospecha relacionada con una supuesta exposición a Rusia, uno de los argumentos que el Gobierno podría utilizar para vetar la operación. Talgo trabaja de forma recurrente con estas entidades de crédito para poder acceder a financiación bancaria y conseguir los avales necesarios para participar en los grandes concursos internacionales del sector ferroviario.
La Relevancia de Talgo y su Respaldo Financiero
Talgo, la empresa española objeto de la OPA, tiene como principales entidades de crédito a Banco Santander, CaixaBank, BBVA, Bankinter, Kutxabank, Ibercaja, Cajamar, Sabadell y el ICO, así como al Banco Europeo de Inversiones (BEI), Commerzbank, Crédit Agricole y Barclays a nivel europeo.
Estas instituciones financieras han desempeñado un papel fundamental en el respaldo a Talgo, prestando hasta 225 millones de euros en mitad de la OPA para renovar la flota de alta velocidad y para una filial de la compañía. A diciembre de 2023, Talgo tenía deudas con entidades de crédito por un total de 393 millones de euros, así como más de 1.100 millones de euros en líneas de avales que aseguran sus obligaciones.
La relevancia de Talgo en el sector ferroviario y su sólido respaldo financiero son aspectos clave que se deben considerar en la evaluación de esta operación de adquisición por parte del Gobierno español.