La Dirección General de Tráfico (DGT) recauda una gran cantidad de dinero a través de sus radares debido a las multas por exceso de velocidad. Estos dispositivos son fundamentales para controlar la seguridad vial y reducir accidentes, pero también generan ingresos significativos para el gobierno. La eficacia de los radares en la aplicación de la ley se ve reflejada en las estadísticas de infracciones y en las campañas de concienciación sobre velocidad adecuada. Sin embargo, algunas críticas señalan que el enfoque debería ser más educativo que punitivo, promoviendo conductas seguras en lugar de simplemente recaudar fondos mediante multas. Y ahora, desde la Dirección, esperan aumentar mucho su recaudación gracias a este kilométrico radar.
9Este es el lugar en el que se va a instalar el nuevo radar de la DGT

De acuerdo con la Delegación del Gobierno de Cantabria, el nuevo radar de la DGT se ubicará en la A-8, cerca de Saltacaballos. Este dispositivo cubrirá un tramo de alrededor de 6 kilómetros y reemplazará a dos radares fijos que actualmente están en la zona. La instalación del radar de tramo busca mejorar la supervisión de la velocidad en este tramo y ofrecer una vigilancia más eficaz para garantizar la seguridad vial.