En la actualidad, el seguro de salud se ha convertido en una prestación social cada vez más valorada por los empleados y considerada crucial por los responsables de las empresas. De acuerdo con el 5º Barómetro de Seguros de Salud, el 83% de las empresas encuestadas ofrece un seguro de salud a sus trabajadores. Este beneficio es percibido como un factor clave para atraer y retener el talento, con el 91% de los directivos opinando que facilita la captación de personal.
Asimismo, el bienestar emocional de los equipos cobra cada vez mayor importancia, con el 56% de las compañías declarando disponer de planes y programas enfocados en esta área. Sin embargo, todavía queda trabajo por hacer para acercar estas iniciativas a los empleados de manera más efectiva.
El Futuro Incierto del Concierto de Muface
Por otro lado, la aseguradora SegurCaixa Adeslas ha advertido que su participación en el próximo concierto de asistencia sanitaria para funcionarios (Muface) está en riesgo si las condiciones actuales no mejoran significativamente. Según Javier Mira, presidente de la compañía, el modelo actual es «inviable y deficitario» para Adeslas, ya que la «escasa dotación económica» del concierto dificulta la atención a un segmento «cada vez más envejecido».
De hecho, la edad media de los mutualistas ha aumentado en 7 años desde 2011, situándose por encima de los 46 años, con el 40% del colectivo cubierto por Adeslas teniendo más de 55 años. Esta tendencia genera una mayor frecuencia en el uso de los servicios asistenciales y una siniestralidad que supera el 100%.
La Necesidad de Revisión de las Condiciones Económicas de Muface
Adeslas no es la única entidad que ha solicitado una revisión de las condiciones económicas del concierto de Muface. Ignacio Garralda, presidente de Mutua Madrileña (donde Adeslas está integrada), y DKV también han criticado la «baja financiación» del sistema, que hace «muy difícil» su viabilidad.
De hecho, DKV cifra en 21 millones de euros las pérdidas directas que registró en 2023 por prestar servicio a Muface, y se estima que para las tres entidades (Adeslas, Asisa y DKV) que prestan servicio al concierto, las pérdidas rondarían los 200 millones de euros al año.
En este contexto, Javier Mira ha reivindicado el valor del mutualismo administrativo para el sistema sanitario, señalando que aporta «un ahorro de costes» al Estado y «una alta satisfacción» de los funcionarios. Sin embargo, ha advertido que «si las condiciones no cambian de forma notable, las pérdidas nos harán imposible presentarnos al próximo concurso».