- Tradicionalmente se ha asociado el Parkinson con síntomas motores, pero se ha observado que los pacientes también experimentan trastornos gastrointestinales, alteraciones sensoriales y dificultades cognitivas.
Este jueves, 11 de abril, se conmemora el Día Mundial del Parkinson, una enfermedad crónica y neurodegenerativa que afecta a un considerable número de personas en España, con cifras estimadas entre 120.000 y 150.000 personas. Esta condición representa la segunda enfermedad neurodegenerativa más común en nuestro país, siendo superada únicamente por la enfermedad de Alzheimer.
Según el jefe de servicio de Neurología del Hospital Universitario La Luz de Madrid, David Pérez Martínez, el Parkinson no discrimina por edades. «Aunque es más prevalente entre los mayores de 65 años, es importante destacar que aproximadamente el 15% de las personas diagnosticadas tienen menos de 50 años, y en casos excepcionales, la enfermedad puede manifestarse incluso antes», advierte el neurólogo.
Tradicionalmente, se ha asociado el Parkinson con síntomas motores como la rigidez, los temblores y el enlentecimiento de los movimientos. «No obstante, hemos observado que los pacientes también experimentan una amplia gama de síntomas no motores, que incluyen trastornos gastrointestinales, alteraciones sensoriales y dificultades cognitivas», señala el doctor.
En este sentido, afirma el especialista, estos síntomas no motores pueden manifestarse en diferentes etapas de la enfermedad, desde la reducción del sentido del olfato hasta problemas urinarios y disfunción sexual. «Los trastornos cognitivos y neuropsiquiátricos también son comunes, aunque tienden a desarrollarse más tarde en el curso de la enfermedad. Para algunos pacientes, estos síntomas no motores pueden tener un impacto significativo en su calidad de vida, incluso mayor aun que los síntomas motores característicos.
Por ello, es fundamental que los neurólogos estén alerta a la hora de detectar y tratar adecuadamente todos los síntomas que puedan surgir en el curso de la enfermedad. «Solo así podemos proporcionar un tratamiento efectivo y mejorar la calidad de vida de aquellos que conviven con el Parkinson», subraya el Dr. David Pérez.
«En el Hospital Universitario La Luz, reconocemos la importancia de abordar el Parkinson de manera integral, teniendo en cuenta tanto los síntomas motores como los no motores. Nuestro enfoque holístico nos permite ofrecer una atención neurológica de calidad, centrada en mejorar el pronóstico y la calidad de vida de nuestros pacientes», sostiene el doctor.
El jefe de servicio de Neurología del Hospital Universitario La Luz, afirma que el Parkinson es mucho más que un trastorno motor. «Solo con un enfoque asistencial integral podemos ayudar a las personas afectadas a vivir de manera más plena y con una mejor calidad de vida».