El presidente de Naturgy, Francisco Reynés, ha asegurado que el consejo de administración respalda la estructura de mando existente actualmente en la compañía, sin la figura de un consejero delegado con el que repartir funciones ejecutivas.
A preguntas de los accionistas en la junta general de la energética, Reynés subrayó que son la comisión de Nombramientos y Retribuciones y el propio consejo de administración -en el que están representados los cuatro grandes accionistas de la gasista como son Criteria Caixa, CVC, GIP (BlackRock) e IFM con más del 80% de su capital– los encargados de decidir «en cada momento cuál es la estructura adecuada para el adecuado gobierno corporativo de la sociedad».
«Y en estos momentos la decisión que se ha tomado por parte del consejo de administración es la estructura que tenemos en marcha», añadió al respecto el directivo.
Reynés, que no hizo a lo largo de toda la junta ninguna mención al proyecto Géminis para escindir la compañía en dos cotizadas y que se encuentra en el cajón desde hace ya más de dos años, zanjó así la brecha que se abrió el pasado verano por el posible nombramiento de un consejero delegado en Naturgy y que se cerró con la renuncia de Ignacio Gutiérrez-Orrantia al cargo y el respaldo de Criteria al presidente y único ejecutivo de la compañía.
Respecto a la posibilidad de que la política de dividendos de la compañía pueda verse trastocada por la volatilidad de la acción, el presidente también descartó esta opción, ya que la retribución a sus accionistas está vinculada a los resultados.
«El ‘pay-out’ de nuestra compañía se sitúa en el rango bajo este año 2023 del resto de nuestros competidores y el dividendo del año 2024 también está sometido a dos consideraciones: obviamente los resultados y, como dijimos en nuestro plan estratégico, mantener un rating crediticio de ‘triple B’. A día de hoy no preveemos por ninguno de estos dos motivos que el dividendo tenga que bajar», añadió al respecto.
En lo que se refiere a la evolución de la cotización de Naturgy en 2024, en el que acumula una importante caída en Bolsa, apuntó como «fecha clave» al pasado 18 de enero, en el que se inició el periodo de revisión de los índices MSCI, derivando posteriormente en una exclusión de Naturgy debido a su bajo capital flotante, situado en torno al 12%.
A este respecto, manifestó que los índices MSCI son «los más relevantes de cara a muchos inversores financieros y muchos inversores algorítmicos», por lo que pertenecer a ellos o no «provoca un aluvión de ventas o de compras en el caso de ser excluido o de ser incluido».
Respecto a su retribución por su cargo de ejecutivo de Naturgy, que en 2023 ascendió a 5,46 millones de euros -un 6,61% menos que el ejercicio anterior- recordó a preguntas de los accionistas que no es él quien se sube el sueldo, y que este cometido está en manos de la Comisión de Nombramientos y Retribuciones.
«Y estoy seguro de que todos los ‘inputs’ necesarios para tomar la decisión que en cada momento crea adecuado son tenidos en cuenta. En concreto, en el año 2023, pese a ser el año de mayores ganancias de la historia de la compañía, mi retribución ha sido un 7% inferior a la del 2022″, recalcó.
SER PROTAGONISTA EN LA TRANSICIÓN ENERGÉTICA.
Por otra parte, en su discurso ante la asamblea, el directivo subrayó que Naturgy quiere «impulsar y captar todas las oportunidades de este nuevo reto que se llama la transición energética», generando valor para todos sus negocios y también respondiendo «con rigor a todos los diferentes grupos de interés».
A este respecto, señaló que Naturgy «no solamente no quiere quedarse atrás, sino que además quiere pasar a una posición de proactividad y liderazgo» en esta transición energética, aunque entendida desde la respuesta al trilema energético, que pasa por garantizar el suministro energético a los clientes a unos precios competitivos y avanzar en los objetivos de sostenibilidad.
«Cualquier solución que haga que este triángulo equilátero se desequilibre creemos que no contribuye desde la posición de Naturgy en avanzar en una transición energética ordenada y sostenible», dijo.
APUESTA POR LAS RENOVABLES Y EL BIOMETANO.
Como prioridades para este 2024, apostó por lograr el reconocimiento del «papel esencial de los ciclos combinados» para dotar de estabilidad al sistema eléctrico y seguir impulsando su apuesta por el plan de crecimiento en energías renovables, tras un 2023 que marcó «un hito en inversión.
Igualmente, apuntó el reto estratégico del grupo por los gases renovables y, especialmente a corto plazo, por el biometano. «Tenemos un plan y lo vamos a ejecutar», dijo.
RESPALDO DE LOS ACCIONISTAS A LAS PROPUESTAS.
En la junta, la compañía recibió un amplio apoyo al conjunto de sus propuestas por los accionistas, en una asamblea que contó con un quórum de asistencia del 90%.
Así, dieron su visto bueno al abono de un dividendo complementario de 0,40 euros por acción, que permitirá alcanzar los 1,40 euros por título comprometidos para el ejercicio 2023, tras acordarse el pasado mes de julio por la compañía elevar la remuneración a sus accionistas.
También respaldaron las cuentas de 2023 del grupo, que se cerró con un beneficio neto de 1.986 millones de euros en 2023, lo que representó un incremento del 20,4% con respecto a las ganancias de 1.649 millones del año anterior y el informe anual sobre las remuneraciones de sus miembros. Asimismo, se votó que las juntas generales extraordinarias del grupo se puedan convocar con una antelación mínima de 15 días.
En concreto, la gestión del consejo de administración, las cuentas anuales y la propuesta de dividendo recibieron el voto afirmativo del 99,9% del capital presente.
En lo que se refiere a la propuesta consultiva sobre el Informe anual de remuneraciones, ha recibido el voto a favor del 76% del capital presente y un 2% de voto en contra.