Si no has probado un buen conejo al ajillo, te estás perdiendo de lo mejor de la gastronomía española. En el vasto y delicioso mundo de la gastronomía, hay platos que trascienden lo ordinario y se convierten en auténticas obras maestras culinarias. Uno de estos platos emblemáticos es el «conejo al ajillo«, una preparación que ha conquistado los paladares más exigentes con su combinación de sabores intensos y texturas exquisitas.
9Llega el momento del punto cítrico

En este punto, cortamos un limón por la mitad y exprimimos su jugo sobre los trozos de conejo. A continuación, añadimos un vasito de vino y otro de caldo a la cazuela, y aumentamos el fuego para que la salsa comience a reducirse.
Sosteniendo las asas de la cazuela con ambas manos, con precaución para evitar quemaduras, agitamos la cazuela y le damos movimientos circulares. Esta acción ayuda a que la salsa se integre y espese, mientras el exceso de líquido se evapora.